Terribles noticias para el Real Madrid. El calvario de las lesiones continúa y sacude con un problema grave para Éder Militao. Al central brasileño se le ha diagnosticado una rotura completa del ligamento cruzado anterior con afectación de ambos meniscos en la pierna derecha.
Militao se lesionó a los 27 minutos, cuando acudió al remate de una acción a balón parado, y en el área de Osasuna se le quedó clavada la rodilla y cayó al césped entre claros gestos de dolor. Rápidamente sus compañeros llamaron a los médicos y el central brasileño fue retirado en camilla.
El defensa internacional brasileño sufrió una grave lesión de rodilla en la primera jornada de La Liga la pasada temporada, el 12 de agosto en San Mamés. Y regresó recuperado de la rotura en el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda el 31 de marzo, también ante el Athletic en el duelo liguero.
Ancelotti carente de defensas en una plantilla que no se reforzó con la salida de Nacho Fernández, en la que ha perdido a Dani Carvajal por una grave lesión de rodilla y sigue esperando la recuperación de David Alaba.
El técnico italiano apostó por el canterano Raúl Asencio como sustituto de Militao, por delante de Jesús Vallejo. El futbolista del Castilla fue quien dio la asistencia a Bellingham en el gol del 2-0.
Rodrygo y Lucas, también KO
Fue una primera parte trágica para el Real Madrid ante Osasuna, a pesar de los dos goles que metieron Vinicius y Bellingham. Antes del percance de Militao, Ancelotti ya tuvo que retirar del campo a uno de sus jugadores por una lesión. Fue Rodrygo, que precisamente volvió al once titular tras haber superado recientemente un problema en el bíceps femoral izquierdo.
Se volvió a lesionar Rodrygo, pero en la pierna contraria, y no le quedó más remedio a Ancelotti que quitarle para meter en su lugar a Brahim Díaz. El delantero brasileño brasileño, tocado del recto femoral, se fue del campo por su propio pie, cojeando y tratando de ocultar con su camiseta las lágrimas en su cara. Después estuvo abatido en el banquillo junto a sus compañeros.
Para colmo, ya cerca del final de la primera parte, Lucas Vázquez también sentía algún problema muscular y pedía el cambio al banquillo. La situación era límite, ya que su cambio dejaba sin más sutituciones al Madrid para el resto del partido agotando las tres ventanas. Arriesgó el banquillo blanco, al dejar al gallego en el campo, con un aparatoso vendaje en uno de sus muslos, para esperar al descanso y hacer ahí el cambio.
Y así fue. Lucas Vázquez, con problemas en el aductor izquierdo tras las primeras exploraciones, no saltó al campo en la segunda mitad y salió Modric en su lugar. El croata se colocó en el centro del campo y Fede Valverde retrasó su posición a la de lateral derecho.