Vinicius, en una acción con Marcos Llorente en el derbi contra el Atlético de Madrid

Vinicius, en una acción con Marcos Llorente en el derbi contra el Atlético de Madrid Reuters

Fútbol MUNDIAL DE CLUBES

Así será el camino de Madrid y Atlético en el Mundial de Clubes: una alfombra roja a los cruces y el 'grupo de la muerte'

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La cara y la cruz en el mismo sorteo. El fútbol español acudía a la configuración de los grupos del nuevo Mundial de Clubes de la FIFA que se disputará el verano que viene con dos representantes, el Real Madrid y el Atlético de Madrid, y se puede confirmar que la suerte se alió con unos pero fue muy esquiva con otros. 

El bombo, para nada puro y condicionado por varios factores, deparó un grupo notablemente sencillo para el Real Madrid. Salzburgo, Pachuca y Al-Hilal parecen rivales más que asequibles para que los blancos puedan cerrar esta fase inicial con pleno de victorias si no se despistan.

El Atlético de Madrid, que conoció a sus rivales mientras estaba en plena faena jugando -y sufriendo- la Copa del Rey ante el Cacereño, sí que va a tener que sudar en Estados Unidos para salir airoso. París Saint-Germain para abrir boca, el anfitrión Seattle Sounders y el campeón Botafogo para cerrar amenazan seriamente con poner contra las cuerdas a los de Simeone.

Infantino y Ronaldo, con el trofeo del Mundial de Clubes.

Infantino y Ronaldo, con el trofeo del Mundial de Clubes. REUTERS

Vía libre para el Madrid

El Real Madrid se va a encontrar el verano que viene con una autopista que lleva directamente hacia los octavos de final. En el fútbol lo que importa es la práctica, pero la teoría dice que los blancos no deberían pasar ningún apuro para estar en los cruces y además como primeros de grupo. 

El Salzburgo parece el rival más complicado por tener el nivel del fútbol europeo. Los austriacos están acostumbrados a competir en Champions League en los últimos años y eso les ha llevado hasta el Mundial de Clubes, si bien es cierto que se sitúan un par de escalones por debajo de los de Ancelotti.

Además, el Salzburgo no está precisamente en su mejor momento. Esta temporada es uno de los equipos del vagón de cola de la nueva Champions League y tiene muy complicado entrar en los cruces. En su liga doméstica, marcha a 11 puntos del líder, lo que demuestra que no está siendo año nada fácil.

El Al-Hilal pondrá un poco de morbo a esta fase de grupos por la presencia de Neymar. Eso, si el brasileño sigue jugando en el equipo asiático después de la mala suerte que está teniendo con las lesiones y lo que su ficha le supone al equipo.

Los saudíes sueñan con poder extrapolar su dominio económico al césped más allá de sus fronteras, y este Mundial de Clubes es un gran escaparate para ello. Bono, Joao Cancelo, Lodi, Ruben Neves o Mitrovic confirman que van a pelear por estar en los cruces.

El Pachuca será el rival de la segunda jornada para el Real Madrid. Todo lo que no sea una goleada sería algo extraño por mucho que los mexicanos cuenten con gente veterana como el español Borja Bastón o Salomon Rondón.

El Atlético, a sudar

El del Atlético de Madrid ya ha sido bautizado como el 'grupo de la muerte'. Los de Simeone van a tener que sudar prácticamente en todos los partidos, empezando desde el debut que tendrán con el París Saint-Germain de Luis Enrique -si es que aguanta todavía en el banquillo-.

Los colchoneros ya saben lo que es vencer al PSG. Lo hicieron hace apenas unas semanas en Champions League y en el Parque de los Príncipes, no sin sufrimiento y con una dosis necesaria incluso de suerte. Aunque los franceses estén lejos de ser el equipo temible que eran cuando estaba el mejor Mbappé, siguen siendo uno de los rivales más complicados que echarse a la cara. 

Tras los parisinos llegarán los aspirantes del Seattle Sounders. Es cierto que, por nombre, no son un contrincante que asuste tanto, pero jugará en casa, contará con el apoyo de la afición y tendrá una dosis extra de motivación.

Esta temporada fueron cuartos en la fase regular de la MLS y posteriormente llegaron hasta las semifinales, donde cayeron derrotados a manos de Los Ángeles Galaxy. Son un equipo con talento capaz de poner en apuros a cualquiera.

Para cerrar la fase de grupos se pondrá enfrente el Botafogo. Es uno de los rivales con mayor trampa de este Mundial de Clubes. Los brasileños son vigentes campeones de la Copa Libertadores y además están a un paso de salir vencedores también del Brasileirão. 

Es cierto que tienen algo de inestabilidad institucional porque se habla de una posible venta del club, pero deportivamente el Botafogo está en uno de los mejores momentos de los últimos tiempos y va a pelear con todo en este Mundial de Clubes.

Los cruces, una trampa

Si el camino parece una alfombra roja para el Real Madrid en la fase de grupos, en cuanto salga a los octavos de final aparecerán los nubarrones. Los blancos se cruzarán con el grupo G en la primera eliminatoria, y eso quiere decir que hay muchas papeletas de que se vean las caras con el Manchester City o la Juventus. 

Se clasifican los dos primeros por cada uno de los grupos, y los primeros clasificados se medirán a los segundos del grupo correspondiente. Así, el Real Madrid tiene todas las papeletas para medirse a los ingleses o a los italianos. 

En cuartos de final, los de Ancelotti podrían cruzarse con rivales como el Dortmund, River Plate o Inter de Milán, y ya en las semifinales podría incluso darse un derbi madrileño entre el Real Madrid y el Atlético. Eso sí, esto sólo sucedería si ambos pasan sus respectivos grupos como primeros clasificados. De lo contrario, el posible derbi tan sólo sería en la final.

En el caso del Atlético, si supera la fase inicial se cruzaría con el grupo A en el que están Palmeiras, Oporto, Al-Ahly y el Inter Miami de Leo Messi. Es un grupo muy abierto, por lo que parece complicado hacer cábalas. 

Posteriormente, en cuartos de final se podría enfrentar a rivales de la talla del Chelsea o del Benfica, siempre dependiendo de cómo fuera la configuración final de cada grupo de esa parte del cuadro.

En definitiva, si los grupos son mucho más asequibles para el Real Madrid, los primeros cruces al menos sí que parecen más benévolos para el Atlético de Madrid. Son cábalas, en cualquier caso, en una competición muy incierta.