Este domingo, el estadio Santiago Bernabéu será testigo de un acontecimiento tan simbólico como emotivo. Real Madrid y Sevilla se enfrentarán en la jornada 18 de La Liga, en un partido que será recordado como el adiós de Jesús Navas al fútbol profesional. El capitán sevillista cerrará su legendaria carrera, compuesta por más de 20 años de dedicación y entrega, en el mismo estadio donde hace exactamente dos décadas jugó por primera vez contra el equipo de Chamartín.
Jesús Navas deja el fútbol como el jugador con más partidos en la historia del Sevilla (705) y también con un lugar en el 'top 10' de futbolistas con más encuentros en Primera División (515). Pero su historia podría haber tomado un rumbo completamente distinto, ya que en varias ocasiones estuvo cerca de fichar por el Real Madrid. Especialmente en 2010, cuando el traspaso parecía hecho, pero un cambio en el banquillo del conjunto blanco truncó el acuerdo.
La oportunidad más clara llegó antes de ese verano. El Sevilla y el Real Madrid habían negociado y acercado posturas para rebajar la cláusula de rescisión de Navas, fijada entonces en 60 millones de euros. La operación recordaba a la que llevó a Sergio Ramos al Bernabéu años atrás.
Sin embargo, los acontecimientos dieron un giro inesperado. En mayo de ese año, el club blanco destituyó al entrenador Manuel Pellegrini y contrató a José Mourinho. El portugués prefirió fichar a Ángel Di María, procedente del Benfica, por 25 millones de euros, un coste menor al que supondría cerrar el traspaso de Navas.
"Antes de la llegada de Mourinho hemos mantenido contactos con el Real Madrid, pero todo ha quedado pendiente del nuevo entrenador", decía José Jesús Mesas, agente del jugador, a El Correo de Andalucía en aquellas fechas. Con el portugués a los mandos, el interés finalmente se desvaneció.
Navas renovó con el Sevilla en enero de 2011, aumentando su salario y reduciendo su cláusula a 35 millones de euros. Tres años después, el extremo palaciego firmó con el Manchester City, cerrando definitivamente cualquier posibilidad de vestirse de blanco.
El Real Madrid ya había mostrado interés por Jesús Navas en 2005, el mismo en el que Sergio Ramos había llegado al club. Sin embargo, las crisis de ansiedad que el joven jugador de Los Palacios y Villafranca sufría en ese momento frenaron cualquier posible traspaso. Este problema amenazó con frenar su enorme proyección futbolística y, por tanto, desaconsejaba hacer una apuesta grande por él, pero Navas logró superarlo, consolidándose como una figura clave en la historia del Sevilla.
Primeros recuerdos en el Bernabéu
El adiós de Jesús Navas en el Bernabéu está cargado de simbolismo. Su debut en ese estadio se produjo un 22 de diciembre de 2004, exactamente 20 años antes de su último partido como profesional. Aquella noche, el Sevilla, dirigido por Joaquín Caparrós, ganó 0-1 gracias a un gol de Julio Baptista. Navas, que ingresó al campo en el minuto 62, vivía su primera experiencia enfrentándose al Real Madrid.
El entrenador sevillista actual, García Pimienta, también hizo hincapié en esta coincidencia durante la rueda de prensa previa al partido. "Ojalá pueda repetirse el domingo. Qué mejor recuerdo para Jesús; sería precioso acabar su carrera con una victoria en el Bernabéu. Estoy seguro de que va a tener un recibimiento espectacular; lo recibirán como lo que es: la mejor leyenda del Sevilla", comentó el técnico.
A lo largo de su carrera, Jesús Navas ha jugado 15 veces en el Santiago Bernabéu, 14 con el Sevilla y una con el Manchester City, en las semifinales de la Champions League de la temporada 2015/16. Aunque sus números en ese estadio no son brillantes —solo ha conseguido tres victorias—, la magnitud de su legado no se mide en estadísticas aisladas. Navas cierra una trayectoria marcada por su velocidad, su entrega y su fidelidad al Sevilla, donde es considerado el mayor mito del club.
Tras colgar las botas este domingo, Jesús Navas será homenajeado el 30 de diciembre en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán. Excompañeros, amigos y figuras del mundo del fútbol se reunirán para celebrar la carrera del 'duende de Los Palacios'. Entre los invitados se encuentran Joaquín Sánchez y Manuel Pellegrini. Mientras el exjugador del Betis ya ha confirmado su asistencia, el técnico chileno —que le pudo haber llevado al Real Madrid hace más de una década— se lo piensa en plena crisis de la relación entre los dos clubes sevillanos.
El partido también marcará el cierre de un año brillante para el Real Madrid, que llega al encuentro como reciente campeón de la Copa Intercontinental, tras vencer al Pachuca en Qatar. Con cinco títulos en 2024, los madridistas buscan seguir presionando por el liderato de La Liga. Pero más allá de la competición, todas las miradas estarán puestas en Navas, cuya despedida promete ser un momento inolvidable para el fútbol español.
El Bernabéu, un estadio que pudo haber sido su hogar en más de una ocasión, se rendirá ante la figura de un jugador que prefirió escribir su historia como emblema del Sevilla. Y este domingo, el fútbol entero se lo reconocerá.