Villar fue invitado por la RFEF a la Supercopa de España y viajó a Arabia Saudí antes de ser procesado por el 'caso Soule'
EL ESPAÑOL descubre la presencia del expresidente en el torneo organizado por la Federación fuera de España junto a la comitiva oficial.
Más información: 'Caso Soule': Ángel María Villar, procesado por favorecer a su hijo con contratos de la RFEF
El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, protagonizó una inesperada aparición en la reciente edición de la Supercopa de España celebrada en Arabia Saudí.
La invitación, extendida por la propia Federación presidida ahora por Rafael Louzán, se llevó a cabo en absoluto secreto y ha suscitado polémica debido a la situación judicial del exdirigente, actualmente procesado por su implicación en el conocido 'Caso Soule'.
Pese a que Ángel María Villar abandonó la presidencia de la RFEF hace más de siete años, su influencia en el ámbito federativo sigue siendo palpable. Villar formó parte de la comitiva oficial que viajó a Yeda, Arabia Saudí, desde días antes del inicio del torneo.
Aunque la RFEF mantuvo su presencia fuera del foco mediático, EL ESPAÑOL ha accedido a una imagen que lo muestra posando junto al trofeo de la Supercopa de España rodeado por otros invitados al acto previo a la final del pasado domingo.
En la fotografía también aparece junto a Fran Reyes, presidente del C.D. Cardones; Mario de la Santa, director de competiciones de la Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas; Joan Laporta, presidente del FC Barcelona; y Domingo Espino, empresario y promotor del Torneo LaLiga Future FC.
La cercanía de Villar con ciertos miembros del organigrama actual de la RFEF queda de manifiesto no solo por esta invitación, sino también por su participación como padrino en la reciente boda de Beatriz Rosety, empleada del departamento de comunicación de la RFEF, y Álvaro de Miguel, integrante del departamento legal de la Federación.
El caso que persigue a Villar
Tras su regreso de Arabia Saudí, Villar recibió malas noticias en el ámbito judicial. El juez Francisco de Jorge, de la Audiencia Nacional, decidió procesar al expresidente de la RFEF en el marco del 'Caso Soule'.
Este caso investiga un presunto desfalco de 4,5 millones de euros de las arcas federativas entre 2007 y 2017 mediante la adjudicación irregular de contratos vinculados a partidos amistosos de la selección española.
Villar, su hijo Gorka Villar y el exvicepresidente de la Federación, Juan Padrón, son acusados de delitos continuados de administración desleal, corrupción en los negocios, apropiación indebida y falsedad documental.
Según el juez, Villar habría utilizado su posición para beneficiar a personas y empresas de su entorno, incluidas aquellas vinculadas a su hijo, a través de la empresa Sport Advisers SL.
El 'caso Soule' investiga una red de corrupción que se habría desarrollado bajo la gestión de Villar en la RFEF. Entre los hechos documentados, destaca la organización de amistosos internacionales de la selección española contra equipos como Corea del Sur, Chile, Venezuela, Perú y Colombia.
En dichos partidos, Sport Advisers SL, dirigida por Gorka Villar, habría recibido beneficios injustificados mientras la RFEF sufría importantes pérdidas.
Un ejemplo significativo es el amistoso contra Corea del Sur de 2010, en el que la RFEF dejó de percibir 300.000 euros debido a la cesión de derechos audiovisuales a la Confederación Coreana de Fútbol (KFA).
Este acuerdo coincidió con la firma de un contrato de asesoramiento legal entre Gorka Villar y la KFA, por el que el hijo del expresidente recibió 36.000 euros. Situaciones similares se repitieron en amistosos posteriores, con perjuicios acumulados para la Federación que alcanzaron los 4,5 millones de euros.
Además de los contratos por partidos amistosos, el juez también señala otras irregularidades, como pagos por servicios no prestados y la simulación de la jubilación de la secretaria personal de Villar para garantizarle derechos económicos no aplicables según la normativa interna de la RFEF. Este último hecho supuso un desembolso adicional de 235.443,04 euros.
El primer gran acto de Louzán
La discreta presencia de Ángel María Villar contrasta con el protagonismo que trató de tener Rafael Louzán, quien debutó como presidente de la RFEF en esta edición de la Supercopa de España tras ganar las elecciones del pasado 16 de diciembre de 2024.
Louzán lideró una intensa agenda de actividades en Arabia Saudí, incluyendo reuniones con representantes de fútbol modesto, entrenadores españoles en el país y autoridades locales como el viceministro de Deportes saudí, Badr bin Abdulrahman Al-Qadi.
En sus declaraciones, Louzán destacó la importancia de colaborar con Arabia Saudí de cara a los Mundiales de 2030 y 2034, organizados respectivamente por España junto a Marruecos y Portugal, y por el país de la península arábiga.
Pese a todo, lo más destacado de sus declaraciones fue el sorprendente anuncio de que la RFEF está negociando que la Supercopa de España femenina también se dispute en Arabia Saudí.
"Estamos avanzando en este tema. Nos vamos muy contentos con la empatía que hemos tenido con el gobierno y las autoridades saudíes. Es algo que esperamos concretar pronto", declaró Louzán a Movistar+.
Algo que sin estar confirmado ya ha levantado ampollas entre algunos sectores debido a la política sobre la igualdad entre hombres y mujeres y los derechos del colectivo LGTBIQ+ en Arabia Saudí.