El FC Barcelona femenino sucumbe ante el Levante y pierde un partido de liga dos años después

Dos años después, el FC Barcelona femenino volvió a perder un partido de liga. Lo hizo frente al Levante en un duelo caótico en el que las azulgrana se quedaron con la miel en los labios después de atosigar la portería rival durante los 90 minutos (1-2).

Fue una debacle del Barça que, además, acumulaba 2.180 días sin perder como local. Esta vez todo salió al revés. No pudo transformar en goles su dominio aplastante habitual y el Levante dio una de las mayores campanadas de los últimos tiempos.

El Barça tuvo el dominio del balón desde el pitido inicial, pero le faltó algo de chispa a la hora de finalizar las jugadas. Sólo Bonmatí y Graham parecían tener esa velocidad de más que acostumbra a ver el Barcelona. La doble Balón de Oro puso un balón perfecto a Salma, cuyo cabezazo se fue fuera tras rebotar en una rival, y probó con la zurda en una jugada marca de la casa que despejó en área pequeña Eva Alonso.

La noruega, por su parte, remató de primeras un pase de Kika y mandó el balón al palo. También se topó con la madera Salma, justo antes del descanso, tras controlar dentro del área y pegarla con la zurda.

La sorpresa

Todo saltó por los aires en el inicio de la segunda parte con el gol de Alharilla. La capitana del Levante aprovechó un excelso cambio de orientación de Bascu para ganar la espalda de Brugts, hacer dos bicicletas y pegarle con el alma para ver, cómo después de golpear en los dos postes, el balón entraba en el fondo de la red.

El Barcelona lo intentó con todo: dos testarazos de Alexia; un remate a bocajarro de Graham que salvó Carbonell bajo palos; un derechazo de Bonmatí desde fuera del área que fue repelido con un vuelo sin motor de Andrea; un remate arriba de Paredes a la salida de un córner... pero fue el Levante quien logró ampliar distancias en una contra en la que Chacón, incombustible, se fue de Engen en carrera, sorteó a Roebuck y marcó a placer.

Aún habría tiempo para el gol de Rolfö, que remató un pase de Graham que se paseó por el área, la expulsión de Bascu por una doble amonestación, un remate de Alexia que sacó Alharilla sobre la bocina y la lesión de Gabaldón que abandonó el terreno de juego entre lágrimas. Las granotas acabaron con dos jugadoras menos y embotelladas en su área pero fueron capaces de aguantar y hacer historia. El Barça es humano.