Karim Benzema terminará la temporada de la peor manera posible: sin ser el delantero titular de Francia en la Eurocopa, donde su equipo parte como una de las dos o tres selecciones favoritas para conquistar el campeonato que se disputará en su propio país. El atacante del Real Madrid anunció en Twitter, horas después de la victoria ante el Wolfsburgo, que "por desgracia para mí y para todos los que siempre me han apoyado, no voy a ser seleccionado para nuestra Eurocopa en Francia".
La noticia culmina meses de citaciones judiciales y sospechas hacia el delantero tras su imputación (como cómplice) en el caso del chantaje sexual a su amigo y compañero de selección Mathieu Valbuena, a quien supuestamente le exigieron 150.000 euros por no publicar un vídeo en el que aparece teniendo relaciones sexuales con una mujer de identidad desconocida. Benzema habría actuado de intermediario en la extorsión (según él, exclusivamente para ayudar a su amigo).
La Federación Francesa de Fútbol, en un comunicado emitido esta tarde, afirmó que "los criterios deportivos son importantes, no exclusivos". Aunque dice no saber qué ocurrió en el citado caso ("le corresponde a la Justicia", aclara), afirma que "la ejemplaridad y la preservación del grupo son igualmente relevantes a la hora de elegir los componentes de la selección".
Durante los últimos meses el jugador ha recibido numerosos reproches públicos por parte de autoridades francesas (señaladamente el primer ministro, Manuel Valls) por su escasa "ejemplaridad", dado el historial de infracciones al que ahora suma este oscuro episodio. El caso 'sex tape' de Valbuena, que acusó a Benzema "de tomarle por tonto" y dijo que "no le haría eso ni a mi peor enemigo", es el último episodio del singular recorrido de Benzema, un indiscutible genio de la pelota, por comisarías y juzgados. En el pasado ha ocupado titulares por estrellar su coche contra una valla, accidentes de tráfico, ser imputado por contratar a una prostituta menor (fue exonerado cuatro años después), organizar carreras ilegales en el centro de Ibiza, conducir a 214 kilómetros por hora, conducir sin carné (dos veces) y, finalmente, esta participación (todavía por aclarar) en la extorsión a un compañero de vestuario del que alguna vez se declaró amigo.
"Arrastrado por el barro"
El futbolista blanco se quejó en diciembre de que le estaban "arrastrando por el barro” y estaba siendo tratado "como un criminal". Siempre ha defendido su inocencia; según sus declaraciones, sólo se arrepiente de haber bromeado sobre el vídeo sexual, un asunto sobre el que asegura rotundamente que sólo se implicó para ayudar a Valbuena después de ser abordado por un intermediario a quien conocía desde la infancia.
El delantero titular de la selección francesa (hasta el mes de octubre al menos) explicó que “sólo quería ayudar a Valbuena, porque a mí me había pasado algo parecido” (en referencia a escándalos sexuales pasados). “Nunca hablamos de dinero”, aclaró (“no esperaba nada a cambio. Yo gano mucho dinero desde hace muchos años”).
El jugador tiene prohibido el contacto con Valbuena (por exigencia del juez) desde que fuese imputado como posible cómplice de los extorsionadores. Se da la circunstancia de que el peor año de Benzema fuera del campo ha sido el mejor de Karim sobre el césped, donde ha batido sus mejores registros goleadores.