Nunca había estado en una Eurocopa. Apenas había pisado un Mundial. Y sin embargo, Gales, la Gales de Gareth Bale y Aaron Ramsey, está en semifinales del torneo tras derrotar a Bélgica y soñando con una final que no haría sino refrendar que esta puede convertirse en la Euro de las sorpresas.
1 julio, 201623:19
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La selección galesa celebra el pase a semifinales con su afición.
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Bale y el resto de la selección galesa celebran el 1-1 ante Bélgica.
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Aficionados galeses en Cardiff.
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Robson-Kanu fue el autor del segundo gol galés, el de la remontada.
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Una aficionada galesa en la grada del estadio de Lille.
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Gareth Bale no brilló especialmente ante Bélgica, pero sigue siendo el alma del equipo británico.
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Thibaut Courtois poco pudo hacer en el tercer tanto de Gales.
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Vokes fue el autor del soberbio cabezazo que puso el 3-1 definitivo en el marcador.
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La selección belga terminó absolutamente decepcionada.
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Courtois pidió disculpas a sus aficionados por el enésimo tropiezo de una selección de la que se esperaba mucho más.
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Bale recibió las felicitaciones de todos sus compañeros.
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Eden Hazard, objetivo del Real Madrid este verano, aplaudió a los aficionados belgas.
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Marc Wilmots se despidió del banquillo belga de la peor de las maneras posibles.
