La Eurocopa vivió su primera gran sorpresa del torneo después de la goleada de Rumanía a Ucrania (3-0). Un duelo en el que los ucranianos partían como grandes favoritos, pero en el que el nivel de sus estrellas estuvo a años luz de lo esperado. Fue un golpe sobre la mesa del combinado rumano que ya mira con optimismo hacia los octavos de final. [Así hemos vivido la victoria de Rumanía ante Ucrania].

Pocos podrían esperar una actuación así de Ucrania. Nada funcionó en el equipo dirigido por Serhiy Rebrov. Desde la portería, donde se vio un Lunin totalmente desconocido y protagonista en dos goles de su rival, hasta Dovbyk que estuvo muy lejos del excelso delantero que ha demostrado ser en el Girona.

Todo lo contrario al nivel ofrecido por Rumanía. Liderados por Stanciu, que marcó el mejor gol del torneo y estuvo a punto de firmar otro de córner olímpico, y un Dennis Man que se convirtió en el pasador de lujo de su equipo, el cuadro rumano borró del mapa a la selección que llegaba como la clara candidata a ser la revelación.

Los ucranianos tardaron 77 minutos en disparar por primera vez entre los tres palos. No merecieron ganar y ahora están obligados a ganar si no quieren despedirse de la Eurocopa a las primeras de cambio. Tendrán que superar a Suiza y probablemente puntuar ante Francia. Lo tienen muy difícil.

Dominio estéril

Ucrania partía como favorita en su debut en la Euro ante Rumanía. El combinado dirigido por Serhiy Rebrov contaba con un plantel lleno de estrellas consagradas en la élite que invitaban a divertir a los aficionados con sus figuras en tres cuartos de campo. Pero no fue así durante los primeros cuarenta y cinco minutos. A pesar de ser dominadores del esférico apenas lograron inquietar la portería de un Nita que no tuvo que intervenir en ningún momento.

Por su parte, Rumanía aceptaba el papel y cedió la iniciativa a su rival en busca de hacer daño en la transición o aprovechar cualquier tipo de opción de ataque para asestar un golpe a su rival. Y así fue, a la media hora de juego Stanciu se inventó un gol imposible que provocó el delirio en las gradas del Allianz Arena.

Lunin falló en la salida de balón y le entregó el cuero a Dennis Man. El extremo vio libre de marca en la frontal a Stanciu y se la dio en busca que el '21' inventara algo. Y vaya que si inventó. De primeras, sin pensárselo, conectó un precioso disparo cruzado con el empeine interior que se coló muy cerca de la escuadra de la portería ucraniana. Un golpeo con efecto y en el que el balón rozó el larguero antes de besar la red. Uno de los mejores goles hasta el momento en la Eurocopa. 

El propio Stanciu, inspiradísimo sobre el césped del Allianz, estuvo muy cerca de mejorar su gol al filo del descanso. El futbolista del Damac saudí botó un córner muy cerrado que sorprendió y supero a Lunin y que acabó estrellándose en el larguero. Una obra de arte que estuvo cerca de rubricarse.

La selección rumana se marchó al descanso con ventaja en el marcador y con la certeza de ser capaz de competir de tú a tú a un equipo que partía como favorito. Debía cambiar algo Ucrania en el descanso si quería darle la vuelta al marcador.

Para olvidar

Tenía que cambiar algo Rebrov, pero lejos de eso se encontró con un equipo mucho más vulnerable que acabó echando por tierra todo el partido con cuatro minutos para olvidar. En un abrir y cerrar de ojos Rumanía dio dos zarpazos letales.

El primero de ellos dejó a Lunin como protagonistas. El portero del Real Madrid no acertó a blocar un disparo de Marin y el cuero se le coló por debajo de las manos. Un día para olvidar para el guardameta ucraniano.

Quedaba por ver si Ucrania se levantaba del golpe, pero sin apenas tiempo para la reacción llegó el tercer gol de Rumanía. De nuevo, Ucrania pecó de falta de atención. Los rumanos sacaron un córner en corto y nadie salió al paso de Dennis Man hasta que éste se internó en el área y le cedió el cuero a Dragus para que tan solo tuviera que empujarla a placer.

El arreón rumano desconectó por completo a Ucrania. Los de Rebrov tardaron 77 minutos en disparar a puerta y apenas inquietaron la portería rival en los últimos minutos. Fue una actuación para olvidar que les complica mucho las cosas de cara a su pase a los octavos de final.