Jude Bellingham protesta una acción en el partido ante Dinamarca.

Jude Bellingham protesta una acción en el partido ante Dinamarca. REUTERS

Eurocopa DINAMARCA 1 - 1 INGLATERRA

Inglaterra se atasca con un pobre empate ante Dinamarca y vuelve a alimentar las dudas en la Eurocopa

Los ingleses sumaron un punto que casi les mete en los octavos de final, pero la imagen que ofrecieron fue muy discreta.

20 junio, 2024 19:53

Inglaterra tampoco asusta. Es la subcampeona del torneo y tiene a estrellas de la talla de Harry Kane o Jude Bellingham, motivos más que suficientes como para tener un respeto enorme, pero después de las dos primeras jornadas de la Eurocopa el combinado inglés sigue sin meter miedo. 

En esta ocasión ni siquiera pudo pasar del empate en su partido ante Dinamarca. Pero es que más allá del resultado, lo peor de todo para el equipo de Southgate fue la pobre imagen que dejó en el terreno de juego. Sin ideas, sin energía y sin movimiento, una selección muy plana que estuvo más cerca de la derrota que de la victoria.

Kane adelantó a Inglaterra tras un error imperdonable a este nivel de la zaga danesa, pero Dinamarca empató todavía en la primera mitad con un golazo de Hjulmand. Si alguien hizo más méritos para ganar ese fue el combinado danés, pero la realidad dice que, pese a todo, los ingleses están ya casi en los octavos de final.

Harry Kane celebra el gol ante Dinamarca.

Harry Kane celebra el gol ante Dinamarca. REUTERS

Los dos goles

Dinamarca no se arrugó ni un ápice por tener enfrente a una de las grandes favoritas del torneo. Una cosa son los nombres y otra lo que realmente sucede sobre el terreno de juego, y en este segundo aspecto los daneses demostraron ser superiores durante buena parte del encuentro a su rival.

Con personalidad saltó al campo el equipo dirigido por Hjulmand, sabiendo que necesitaba los puntos para no verse en una situación muy complicada de cara a la última jornada. Inglaterra se vio sorprendida y apenas pudo pasar ni siquiera del medio del campo con el balón controlado durante los primeros diez minutos. El primer rayo de esperanza lo puso un tiro flojo de Foden que se marchó alto tras la primera jugada combinada de los de Southgate. 

Bellingham se lanza al suelo para detener el tiro de Eriksen.

Bellingham se lanza al suelo para detener el tiro de Eriksen. REUTERS

No estaba siendo ni mucho menos un partido brillante por parte de Inglaterra, pero aún así la subcampeona consiguió adelantarse en el marcador. Walker le robó la cartera de una forma incluso grosera a Kristiansen, se internó en el área y eligió mal a la hora de poner el centro. Sin embargo, tuvo suerte, porque tras dos rechaces el balón le cayó a Kane para que empujara a gol.

Cosas del fútbol, este tipo de balones siempre le caen al que tiene el 9' a la espalda, al delantero de verdad. Kane no defraudó y empujó para poner en ventaja a su selección pese al juego tan discreto. 

Si Inglaterra estaba a punto del bostezo con el empate, ya con el marcador a favor directamente pasó a dormirse en el partido. Dinamarca se hizo con el control del encuentro, pasó a vivir constantemente en la mitad de campo inglesa y empezó a amenazar a Pickford. 

Hjulmand celebra el gol ante Inglaterra.

Hjulmand celebra el gol ante Inglaterra. REUTERS

Merecía cuanto menos el empate, y este llegó con una auténtica obra de arte. Hjulmand recibió un balón a más de 20 metros de la portería y, sin apenas impulso y sin pensárselo dos veces, clavó un derechazo abajo que tocó en el palo y que se coló en la portería inglesa. Un gol de bandera para equilibrar de nuevo la balanza.

Inglaterra desesperó con un juego cansino y Dinamarca no solo es que creyera, sino que seguramente incluso mereció todavía más antes del descanso. Sin embargo, se llegó con empate al término de la primera mitad.

Más de lo mismo

La segunda mitad evidenció las mismas carencias de Inglaterra. Sin ritmo, sin movimiento, sin intensidad... y sin estrellas. Ni Bellingham, ni Foden, ni Harry Kane. Nadie fue capaz de asumir el mando en el equipo de Southgate que, dicho sea de paso, también tardó en reaccionar lo suyo. 

Aún así Saka pudo poner por delante a los ingleses en un nuevo despiste imperdonable de la defensa danesa, pero su remate de cabeza se marchó por poco ante la salida a destiempo de Schmeichel. 

Mientras Dinamarca seguía cómoda en el partido, un chispazo de Foden estuvo a punto de convertirse en otro golazo. El del City ejecutó un bonito disparo desde la frontal del área que superó a Schemeichel pero que terminó estrellándose contra la madera. Incluso Watkins estuvo cerca del gol.

Pickford, en el partido contra Dinamarca.

Pickford, en el partido contra Dinamarca. REUTERS

En cualquier caso fueron zarpazos, pequeños detalles aislados dentro de un mal partido en conjunto por parte de Inglaterra. Y es que Dinamarca tuvo seguramente las ocasiones más claras en el tramo final del encuentro. Primero fue Christensen el que remató arriba en el área pequeña un córner, y posteriormente un disparo lejano de Hojbjerg el que a punto estuvo de significar la victoria danesa. 

Pese a las malas sensaciones, el punto pone ya casi a Inglaterra en los octavos de final y afrontará la última jornada con todo de cara. Dinamarca, con dos puntos, tendrá que trabajar hasta el final.