Que Kylian Mbappé iba a ser protagonista de la Eurocopa era un axioma sobradamente conocido desde antes de que iniciase el torneo de selecciones. Sus 44 goles y diez asistencias durante la temporada con el PSG eran su carta de presentación al certamen que más focos acapara y del que podría salir el próximo Balón de Oro.
El nombre del francés retumbó con fuerza en el espectro futbolístico antes de que empezara el torneo, cuando el Real Madrid publicó el tuit más esperado por sus aficionados. "Comunicado oficial: Mbappé". Todo el mundo comprendió el escueto mensaje. El francés ya era jugador blanco para las próximas cinco temporadas, aunque su presentación oficial no se producirá hasta el 16 de julio.
"Es un sueño hecho realidad. Me gustaría dar las gracias a todas las personas que me han enviado mensajes y a todos los que han contribuido a esta operación. Quiero agradecer a todas las personas del Real Madrid que han trabajado, y a Florentino especialmente, que me dio confianza desde el primer momento", comentó al respecto desde la concentración de la selección francesa.
Se acababa así su etapa como jugador del PSG, pero no las tensiones con el conjunto parisino. Tras una temporada marcada por amenazas y tensiones entre el club y el jugador. Mbappé mantiene un tira y afloja con Nasser Al-Khelaïfi por los impagos que viene sufriendo desde el paso mes de abril.
El jugador ya ha presentado una reclamación formal contra el PSG por los salarios y primas impagadas cuya cantidad asciende a un montante cercano a los 100 millones de euros, según informó L'Equipe. Una cifra que, siguiendo la información del mencionado medio galo, el PSG no está por la labor de abonar. Por lo que el toma y daca deberá seguir en los tribunales.
Todo eso sucede mientras él está enmascarado, no en toda esta situación, sino de manera literal. Mbappé ya ha completado varias sesiones de entrenamiento con una máscara para proteger su nariz tras el golpe que sufrió ante Austria en el debut de Francia que le dejó el rostro ensangrentado.
"Todo va en la dirección correcta, ayer pudo salir y hacer algo de entreno como hará esta tarde, las cosas van en la dirección correcta para que pueda estar disponible mañana. Vamos a asegurarnos de que esté disponible", aseguró Deschamps en la previa del partido ante Países Bajos. Sin embargo, el seleccionador francés decidió no arriesgar y le dejó en el banquillo.
Discurso político
Antes de ello, Mbappé ya era el tema central de cada conversación tras una rueda de prensa cargada de mensajes políticos en la que animó a todos los jóvenes a votar y se mostró contrario a los extremos ante el auge de la ultraderecha. "Estamos en un momento importante en nuestro país. Somos futbolistas pero también personas y no podemos desconectar de la realidad. Los jóvenes pueden hacer la diferencia y los extremos están llamando a la puerta, por eso quiero llamar su atención. Jóvenes, id a votar. Sé que mi voz será escuchada. Queremos respeto y diversidad y cada voto cuenta. Espero que se haga una buena elección y estemos orgullosos de vestir esta camiseta el 7 de julio", reflexionó.
Y la cosa no quedó ahí. Cuestionado por las declaraciones de Marcus Thuram en las que avisaba sobre el partido de Le Pen, Mbappé aseguró estar "de acuerdo" con su compañero de selección. "Yo quiero diversidad, tolerancia y respeto, Marcus no ha ido lejos con sus comentarios. Tenemos libertad de expresión para hablar, y yo me alineo con él", insistió.
Son las aventuras de Kylian Mbappé y una Eurocopa que comenzó tras su fichaje por el Real Madrid y en la que acumula una ensangrentada lesión, se ha puesto en el centro político, pero de momento ningún tanto.