España ya sabe a quién tiene que estudiar desde este preciso momento hasta el próximo domingo. Inglaterra volvió a obrar un nuevo milagro en la Eurocopa y se agarró a un gol inesperado de Watkins en el último minuto del partido para desbancar a Países Bajos y conseguir el pase a la final. [Así vivimos la victoria de Inglaterra sobre Países Bajos en la Eurocopa]

Los ingleses, que hasta la edición de 2020 nunca habían llegado a una final de la Eurocopa, jugarán ahora el partido definitivo del torneo por segunda vez consecutiva. Después de aquella dolorosa derrota contra Italia, ahora tratarán de resarcirse ante España y de levantar el título por primera vez en su historia.

La selección de los Three Lions remontó el tanto inicial de Xavi Simons en un partido de dos caras, entretenido en la primera parte y soporífero en la segunda. El empate de Kane desde el punto de penalti dio alas a los ingleses y el tanto final de Watkins dejó un final de infarto, propio de unas semifinales de la Eurocopa.

Un partido abierto

No había demasiadas expectativas puestas en esta semifinal por lo visto hasta la fecha en la Eurocopa. Inglaterra había sido una selección plana y casi inofensiva hasta la fecha, y aunque Países Bajos había tenido buenos momentos, tampoco contaba sobre el papel con una calidad excelsa como para maravillar.

Sin embargo, unas semifinales siempre son distintas por haber en juego el pase al gran partido del torneo, ese lugar en el que todos quieren estar. Quizás por eso el partido salió muy diferente a lo que se esperaba, con ritmo, llegadas e intervenciones de los porteros. Por eso, o porque el primer gol llegó cuando tan sólo se habían jugado siete minutos de encuentro.

Declan Rice perdió un balón en campo propio, Reijnders apretó para robar y enseguida conectó con Xavi Simons. El centrocampista, totalmente desatado, se plantó en la frontal del área y le pegó con el alma y con su pierna derecha al esférico para ponerlo en la escuadra de la portería inglesa. Es cierto que Pickford pudo hacer algo más, pero la potencia del lanzamiento hacía mucho más complicado todo.

Xavi Simons celebra el gol ante Inglaterra. REUTERS

Este auténtico golazo agitó el partido. Inglaterra, lejos de acusar el golpe, no tardó en reaccionar y enseguida se remangó para buscar el empate. Algún centro al área sin rematador y un disparo lejano de Kane sirvieron para ir abrillantando el punto de mira, y al paso por el cuarto de hora llegó la acción decisiva.

Saka realizó una gran jugada personal y tras un rechace Kane se encontró con un balón botando en el punto de penalti. Con una media volea, el delantero impactó con el esférico pero también apareció el plantillazo de Dumfries. Una acción muy peligrosa que el colegiado dejó pasar en primera instancia.

Sin embargo, varios instantes después y mientras Kane seguía doliéndose en el campo, el VAR llamó al árbitro para que acudiera a ver este lance en el monitor. Parecía un penalti clamoroso y, efectivamente, tras la revisión el balón se fue a los once metros. Desde allí Kane ejecutó un disparo impecable para hacer el empate.

Harry Kane ejecuta el penalti para empatar ante Países Bajos. REUTERS

A raíz de este gol, los de Southgate se hicieron con el mando del partido. Foden estuvo a punto de hacer el segundo tras un pase filtrado maravilloso de Mainoo, pero Dumfries llegó sobre la misma línea de fondo para evitar el tanto de Inglaterra. 

Estaba siendo el mejor partido de los ingleses en la Eurocopa, de largo, pero en esas Dumfries avisó con un cabezazo al larguero tras un saque de esquina. La réplica la puso de inmediato Foden con un disparo al más puro estilo Lamine Yamal contra Francia. El partidazo se marchó igualado al descanso.

El milagro de Watkins

La segunda mitad resultó todo lo contrario. Al menos en los primeros minutos. Se acabaron las llegadas constantes a las áreas, se terminaron las intervenciones de los porteros y desaparecieron los lanzamientos a puerta. 

Como si a los dos equipos les hubiera entrado el miedo a perder y a no estar en la final, hubo un pequeño pacto de no agresión. Eso, hasta que Países Bajos decidió romper el armisticio con una acción a balón parado en la que Van Dijk, con un remate extraño, obligó a Pickford a realizar una intervención extraordinaria.

Camino de la prórroga, hubo un mini infarto en los Países Bajos cuando Saka marcó un gol a falta de diez minutos para el final. Walker puso el centro y el del Arsenal remató dentro del área al fondo de las mallas, pero Walker estaba adelantado en el momento de recibir el pase. 

Watkins celebra el gol anotado a Países Bajos en el último minuto. REUTERS

Parecía que la media hora de tiempo suplementario era imposible de evitar, pero entonces llegó un nuevo milagro de Inglaterra. Sin contra Eslovaquia fue Bellingham el que apareció en el tiempo añadido con una chilena de ensueño para forzar la prórroga, en este caso el héroe fue Watkins.

El delantero había entrado en la segunda mitad y fue determinante. Con el minuto 90 ya campeando en el videomarcador, Watkins recibió de espaldas dentro del área, Van Dijk le dio unos centímetros y el inglés hizo el resto. Se giró rápidamente, armó la pierna derecha en un abrir y cerrar de ojos y batió a Verbruggen con un disparo raso cruzado.

La locura se apoderó de Inglaterra entera, un país que vive por el fútbol y que vibra con una selección que le ha dado pocas alegrías a lo largo de la historia. Ahora, pese a seguir sin conectar con su mejor juego, los ingleses pelearán de nuevo por conseguir su primera Eurocopa y lo harán contra España.

Países Bajos 1 - 2 Inglaterra

Países Bajos: Verbruggen; Dumfries (Zirkzee, m. 93), De Vrij, Van Dijk, Aké; Reijnders, Schouten; Malen (Weghorts, m. 46), Simons (Brobbey, m. 91), Gakpo; Memphis (Veerman, m. 35).



Inglaterra: Pickford; Walker, Stones, Guéhi, Trippier (Shaw, m. 46); Rice, Mainoo (Gallaguer, m. 91); Saka (Konsa, m. 91), Bellingham, Foden (Palmer, m. 76); Kane (Watkins, m. 76).



Goles: 1-0, m. 7: Xavi Simons. 1-1, m. 15: Kane, de penalti. 1-2, m. 90: Ollie Watkins.



Árbitro: Felix Zwayer (Alemania). Amonestó con tarjeta amarilla a los neerlandeses Dumfries (m. 17), Van Dijk (m. 86) y Xavi Simons (m. 90) y a los ingleses Bellingham (m. 72) y Saka (m. 86).



Incidencias: partido correspondiente a las semifinales de la Eurocopa 2024 disputado en el estadio Westfalen de la ciudad alemana de Dortmund ante unos 62.000 espectadores.