Inglaterra sigue acumulando escándalos de sus jugadores profesionales en torno a respetar el confinamiento por la pandemia de coronavirus. Después de que Jack Grealish estrellase su coche yendo en zapatillas de andar por casa después de pedir a los aficionados de su equipo que se quedaran en sus domicilios para ayudar a paliar los efectos del Covid-19.
El último en liarla ha sido Kyle Walker. El jugador del Manchester City se habría saltado la cuarentena para disfrutar de una fiesta sexual con un amigo y dos prostitutas en su apartamento, según ha informado este domingo el diario The Sun. El inglés, como hizo su compatriota, también colaboró con su club en los muchos mensajes que se están mandando para que todo el mundo respete las medidas de los gobiernos.
Ha sido una de las protagonistas de esta historia la que ha desvelado todo lo sucedido. Explicó en The Sun que la sesión duró tres horas y que lo pasaron muy bien. Pero es que no es la primera vez que jugadores ingleses hacen cosas similares durante esta cuarentena. Los nombres de Dele Alli, Riyad Mahrez, James Maddison y Ben Chilwell también fueron vistos a finales de marzo en algunos pubs de Londres.
El defensa ya ha pedido disculpas por lo sucedido, pero el Manchester City está estudiando los hechos y, según apuntan los medios, seguramente sancione a Walker. Louise McNamara, la protagonista que ha contado la historia, explicó que los hechos sucedieron en un apartamento en Hale, en Chesire, junto a una amiga brasileña.
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