Jack Grealish fue el protagonista del gesto más emotivo que se vio en la segunda jornada del Mundial de Qatar. El futbolista británico consiguió marcar uno de los goles en la goleada de Inglaterra ante Irán y en su celebración se acordó de Finlay, un niño con parálisis cerebral al que conoció hace un tiempo y al que le realizó una promesa.
El joven Finlay, gran aficionado del Manchester City de apenas 11 años de edad y con parálisis cerebral, tuvo la oportunidad de encontrarse con su ídolo hace un tiempo. Ambos estuvieron charlando durante un buen rato, compartiendo confidencias y bromeando. En este divertido encuentro que el futbolista y su fan tuvieron, todo terminó con una promesa por parte del crack inglés.
Grealish le prometió a su admirador que se acordaría de él en la próxima ocasión que anotara un gol y que haría una celebración para él. Finlay accedió encantado. "¡Haz el gusanito!", le dijo el joven fan, a la vez que movía su cuerpo para enseñarle cómo debía hacerlo. Los dos ensayaron y, entre risas, el hombre del Manchester City accedió a hacer ese movimiento, balanceando su tronco y sus brazos, en la próxima ocasión que lograra anotar un gol.
Este lunes Jack Grealish cumplió su palabra. El talentoso futbolista inglés entró en la segunda mitad al terreno de juego, cuando ya Inglaterra estaba mandando con comodidad en el marcador. El del City estuvo activo y contribuyó a certificar la goleada de Inglaterra ya que, con el tiempo cumplido, anotó el sexto y definitivo tanto del combinado que dirige Gareth Southgate.
Entonces, en la celebración Grealish se acordó de Finlay. Tal y como le había prometido, se paró, sonrió y comenzó a balancear su cuerpo y sus brazos tal y como le había pedido su joven fan. Un precioso gesto que ha desatado los aplausos y las reacciones favorables en el mundo del fútbol.