Croacia venció a Brasil en la tanda de penaltis y se clasificó para las semifinales del Mundial de Qatar. El equipo de Zlatko Dalic tumbó a la gran favorita por el título y dio la primera sorpresa de la ronda de cuartos de final en la Copa del Mundo. Los jugadores celebraron sobre el terreno de juego la histórica victoria con lágrimas en sus ojos, pero no han sido los únicos que se han emocionado con este importante éxito.
El primer ministro del país, Andrej Plenković, ha protagonizado uno de los momentos más divertidos y emotivos del día. El político del estado balcánico se encontraba participando este viernes en la IX Cumbre Euromediterránea cuando en mitad del acto fue felicitado por la hazaña que acababan de realizar los Luka Modric, Mateo Kovacic y compañía, quienes protagonizaron la gran campanada del Mundial.
En dicho momento se encontraba junto al presidente español Pedro Sánchez y no pudo evitar levantar su brazo a medida que iban aflorando los aplausos entre los asistentes a las diferentes ponencias que se estaban llevando a cabo. Andrej Plenković ha estado durante toda la cumbre muy pendiente del partido de Croacia. De hecho, estuvo ausente durante un tiempo para poder seguir los penaltis junto a otros jefes de gobierno.
Ocho han sido los máximos representantes políticos a nivel nacional que han acudido a esta IX Cumbre Euromediterránea y ninguno de ellos ha querido perder la oportunidad de felicitar a su homólogo, quien se mostró visiblemente emocionado y orgulloso. Seguramente, como muchos de sus compatriotas, esperaban que el camino de Croacia en el Mundial tocara a su fin ante la gran favorita.
Las felicitaciones a Plenković
Pedro Sánchez le transmitió su felicitación por "el excelente resultado" ante un país que es una potencia futbolística como es Brasil. Tras el mensaje del político español, los representantes de Portugal, Grecia, Malta, Francia, Chipre y Eslovenia rompieron a aplaudir también para celebrar con su compañero este resultado que ha supuesto un auténtico shock en el planeta fútbol. Los periodistas asistentes a la cumbre también se unieron a la celebración al igual que el ministro de exteriores de Italia.
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Plenković pidió no comparecer hasta haber visto como Rodrygo y Marquinhos fallaban y le daban el pase a las semifinales del Mundial. En su celebración, no dudó en agitar su brazo de manera insistente y repetir el gesto de pulgar en alto en señal de victoria. Un momento divertido y entrañable en mitad de una situación en la que suele reinar la seriedad de los asuntos que se tratan.
"Estoy más centrado en lo que está ocurriendo en casa que en lo que ha ocurrido hoy". Esto ha asegurado el propio primer ministro croata, quien dejó el discurso más breve de la noche. Además, aseguró que Alicante, ciudad que ha albergado la cumbre, "siempre va a tener un lugar muy especial" en su corazón. Por si fuera poco, recalcó que este era su acto más especial desde que está al frente de la élite política del país.
El presidente de la república francesa, Emmanuel Macron, y el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, hicieron bromas sobre lo sucedido. Mientras tanto, el primer ministro portugués, Antonio Costa, ha felicitado a Plenković pese a que ha mostrado su pesar por la eliminación brasileña: "Cada vez que Brasil pierde, Portugal se siente un poquito triste pero hoy doy la enhorabuena a Plenković".