¿Por qué el objetivo del Atlético es ser tercero?
Su deseo es ganar la Liga, pero la posición que le corresponde es la de estar por detrás de Madrid y Barcelona. EL ESPAÑOL recoge las razones antes de su partido contra el Villarreal de este lunes (20:45).
12 diciembre, 2016 00:26Noticias relacionadas
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El 15 de octubre, al finalizar la octava jornada (7-1 contra el Granada en el Calderón), el Atlético se colocaba colíder empatado a puntos con su vecino en la capital. Menos de dos meses después, tras tres derrotas, un empate y dos victorias, lucha por entrar en puestos de Champions League. ¿Qué ha pasado durante este tiempo? Nada, en teoría, preocupante. “El objetivo es ser terceros, tranquilos”, confesaba Simeone tras desaprovechar contra el Espanyol (0-0) la oportunidad de recortarle puntos al Real Madrid, líder de la competición. Palabras que para algunos denotan falta de ambición y, sin embargo, para otros responden a un análisis racional. ¿Quién lleva razón? Depende. Pero la realidad es que hay muchos más argumentos para mantener la tesis del Cholo que la contraria cuando restan horas para el partido de este lunes contra el Villarreal (20:45 horas).
20 años, dos títulos de Liga y tres terceras posiciones
El aficionado, como es natural, se acostumbra rápidamente a los triunfos, pero sería de necios no reconocer ni tener en cuenta hoy en día la historia reciente del club del Manzanares. El Atlético, en los últimos 20 años, sólo ha ganado la Liga en dos ocasiones (1995/96, campaña del doblete, y 2013/14), y únicamente ha ocupado la tercera posición en tres temporadas –en todas ellas, con el Cholo en el banquillo-. Por tanto, desde un punto de vista racional es difícil pedirle más al equipo de Simeone. El problema, en este caso, es que se confunden las aspiraciones -ganarlo todo, por qué no- con los objetivos, mucho más realistas merced a los rivales en España y Europa.
La situación actual y las exigencias
El club rojiblanco, como Madrid y Barça, es un grande. Sí, lo es por afición, por historia y por muchas otras cosas. Sin embargo, las exigencias son otras, sobre todo, cuando el líder está a nueve puntos y hay hasta seis equipos (el propio Atlético, Sevilla, Real Sociedad, Villarreal, Athletic, Espanyol y Eibar) en ocho puntos. Por tanto, la competencia por la tercera plaza, esta temporada, es mayor. Y eso lo sabe Simeone, que, dadas las circunstancias, da por bueno acabar por detrás de Barcelona y Real Madrid en Liga. Y, en el fondo, todos están de acuerdo en que si el equipo gana la Copa o la Champions y queda en esa posición, sin duda, el curso sería inmejorable.
El valor de la plantilla
El Atlético de Madrid ha fichado esta temporada por valor de 81 millones de euros. Es decir, ha gastado más que Real Madrid (30), pero menos que el Barcelona (122). Por tanto, si sólo se tiene en cuenta lo invertido el pasado verano, el conjunto rojiblanco tendría que ir segundo en Liga. Pero, ¿sería justo? Desde luego, no. Y no lo es porque en el computo entre compras y ventas de los últimos cuatro años, el conjunto colchonero sólo habría gastado 14 millones (por los 251 de los culés o los 164 del equipo de Zidane). “El objetivo es ser terceros, tranquilos”, dijo el Cholo. Pues eso.
Una afición comprensiva
El pasado sábado, en el Bernabéu, una parte de la afición del Real Madrid pitó a Sergio Ramos. Después, tras su gol en el descuento, le aplaudieron. Con todo lo que ha dado el defensa por el club, ¿es normal que tenga que soportar abucheos? No corresponde a este periodista decirlo, pero, esto, naturalmente, no pasa en otros estadios. En el Calderón, por ejemplo, es difícil escuchar silbidos. De hecho, es casi imposible. Desde la llegada de Simeone, las crisis se solucionan con aplausos y los baches del equipo con apoyo. Por todo ello, el seguidor rojiblanco no observaría como un fracaso un teórico tercer puesto. Muy al contrario, lo celebraría por acercarles, un año más, a la Champions League.