El Espanyol inició la victoria contra el Deportivo en el RCDE Stadium con goles de Baptistao en el minuto 5 y de Arribas en propia en el 23, y se sobrepuso al tanto en la reanudación de Borges con un penalti obra de Moreno, el tercero, que también culminó el vendaval en el 90.
Los locales exhibieron un mayor potencial ofensivo, aunque pagaron las relajaciones en la reanudación. Los gallegos, por su parte, lucieron su mejor versión con el 2-0, pero la pena máxima frustró sus aspiraciones. Los pericos cierran la semana con siete puntos de nueve y los de Mel, en puestos de descenso.
Muy poco tardaron los catalanes en adelantarse. Leo Baptistao aprovechó su velocidad y un centro de Víctor Sánchez para levantar al RCDE Stadium con el primer gol de la mañana. El fútbol local tenía mucho más desparpajo que el gallego: el anfitrión buscaba firmar el segundo pronto.
El Deportivo lo probaba de la mano de Cartabia. Dos veces lo intentó el medio argentino, sin éxito. Lucas Pérez, por su parte, estaba muy solo arriba. Era insuficiente para inquietar a Pau López, sin apenas trabajo en este tramo del partido. Los focos estaban puestos en las carreras constantes de los de Quique Sánchez Flores.
La insistencia de Jurado, Piatti, Baptistao y Moreno tuvo su recompensa en el minuto 23. El argentino sacó de esquina y, pese al intento de los puntas blanquiazules en rematar, el balón acabó en la meta de Pantilimon. Arribas marcó en propia puerta y puso el choque muy cuesta arriba para los suyos.
De todos modos, con el 2-0 en el luminoso apareció la mejor versión del Deportivo. Un latigazo de Colak, novedad de Mel en este encuentro, desde la frontal inició los avisos. El turco, minutos después, volvió a examinar los reflejos de Pau poco después. Y el central Schär también se aventuró para probar desde lejos.
La defensa del Espanyol, que en la anterior jornada dejó por primera vez la meta a cero, rebajó su tensión en los últimos compases de la primera parte, aunque no hubo alteraciones en el marcador antes del descanso. De todos modos, sí hubo cambios en el guión del encuentro en la reanudación, favorables a los gallegos.
Guilherme incentivó los elogios para Pau en el 50, pero tres minutos después el portero gerundense no pudo evitar el 2-1. Borges acortó distancias con un remate forzado dentro del área. Gran parte del mérito fue de Luisinho, que deshizo el planteamiento defensivo local desde la banda izquierda.
Quique Sánchez Flores refrescó su once para recuperar la intensidad inicial y dio entrada a Granero y Sergio García. El Deportivo, por su parte, perseguía el empate en el RCDE Stadium con ocasiones tímidas, pero constantes. Y entró Andone para incentivar su ataque. Los acercamientos blanquiazules se habían reducido.
El Espanyol atravesaba una fase gris de juego, aunque un penalti lo cambió todo. En el minuto 72, Arribas cometió una falta clara sobre Granero. Gerard Moreno fue el encargado de lanzar la pena máxima: acabo dentro tras un disparo raso y ajustado al palo derecho. Pantilimon adivinó la dirección, pero su estirada no bastó.
El Deportivo estaba obligado a desprotegerse atrás para intentar una remontada cada vez más complicada. Los catalanes, siempre peligrosos a la contra, se encontraban ahora más cómodos. Sergio García, muy activo desde que saltó al césped, tuvo varias opciones de estrenarse esta temporada. Mel se desesperaba en la banda.
Faltaba el cuarto de Gerard Moreno, en tiempo de descuento. Leo Baptistao centró desde la banda y el ariete catalán firmó el doblete a placer. Fue el colofón a una semana fantástica para el anfitrión y la sentencia, ya definitiva, para el cuadro coruñés.