El año 2024 ha sido un periodo inolvidable para Scottie Scheffler. Con apenas 28 años, el golfista estadounidense ha dominado el circuito profesional, logrando hitos extraordinarios tanto en lo deportivo como en lo económico.
No solo ha ganado su segundo título en el Masters de Augusta, sino que también se ha consagrado campeón de la FedEx Cup, acumulando premios que rondan los 60 millones de euros.
Pero no es el único que ha salido beneficiado: su caddie, Ted Scott, ha sido una pieza clave en su éxito y se ha convertido en una de las personas mejor pagadas en el mundo del golf este año gracias a su colaboración con Scheffler.
Éxitos sin precedentes
Scheffler ha disfrutado de un 2024 cargado de victorias. Aparte de ganar en Augusta y la FedEx Cup, ha conseguido el oro olímpico en los Juegos Olímpicos de París y ha añadido cinco títulos más del PGA Tour a su palmarés.
Este dominio en los campos de golf le ha permitido no solo afianzarse como el número uno del mundo, sino también embolsarse grandes cantidades de dinero en premios.
El formato de pago entre un golfista profesional y su caddie suele implicar que este último reciba alrededor del 10% de las ganancias cuando el jugador gana un torneo, el 7% si termina en el top 10 y un 5% por otros resultados.
En el caso de Ted Scott, su colaboración con Scheffler ha resultado en una auténtica fortuna. Solo con la victoria en la FedEx Cup, Scott ganó unos de 2 millones de euros, una cantidad que lo ubicaría en el puesto 58 de la lista de ganancias de jugadores del PGA Tour, superando incluso a figuras como Jordan Spieth.
Más que un caddie
Ted Scott no es un caddie cualquiera. Antes de unirse a Scheffler en 2021, trabajó durante 15 años con Bubba Watson, otro importante golfista con quien forjó una carrera exitosa.
Sin embargo, tras la separación de Watson, encontró en Scheffler no solo un nuevo jugador al que guiar, sino también un compañero con quien comparte valores fundamentales, como su fe cristiana.
Ambos asistían al mismo grupo de estudio bíblico antes de comenzar a trabajar juntos, lo que cimentó su relación más allá del terreno profesional. Scheffler ha expresado en varias ocasiones la importancia que la fe tiene en su vida, y esto fue determinante para elegir a Scott como su caddie.
En una entrevista, Scheffler explicó: "Yo realmente quería trabajar con alguien que fuera cristiano, porque eso es lo que trato de reflejar en mi vida". Este vínculo personal ha sido clave en su éxito conjunto y ha fortalecido una relación basada en más que solo el golf.
Tiger Woods y Steve Williams
La situación de Scott y Scheffler ha llevado inevitablemente a comparaciones con otra famosa dupla en el mundo del golf: Tiger Woods y su caddie Steve Williams.
Durante los años de mayor esplendor de 'El Tigre', Williams no solo fue testigo y apoyo en uno de los mejores periodos de un golfista en la historia, sino que también se benefició económicamente de manera impresionante.
Williams trabajó con Woods desde 1999 hasta 2011, un periodo en el que Woods ganó 13 de sus 15 títulos de Major. Durante esos años, Williams se convirtió en una figura casi tan reconocida como el propio Woods, y llegó a ser el deportista mejor pagado de Nueva Zelanda, superando a leyendas de otros deportes como el rugby.
Williams no solo fue su caddie, sino también un amigo cercano, acompañándolo en momentos importantes de su vida personal, como su boda en 2005. Asimismo, se ganó una reputación de protector feroz de Woods, protagonizando incidentes como el arrebato de la cámara de un espectador que perturbaba a Woods durante un golpe, lanzándola al agua.
A pesar de esta relación tan cercana, su separación en 2011 fue abrupta y estuvo rodeada de controversia, en parte debido a los escándalos personales que afectaron la vida de Woods en ese periodo.
Al igual que en el caso de Woods y Williams, la relación entre Scheffler y Scott trasciende lo económico. Sin embargo, es innegable que el éxito financiero ha sido considerable para ambos.
En palabras del propio Scheffler, la administración de las ganancias se ha vuelto tan compleja que ha tenido que contratar a una persona dedicada exclusivamente a gestionar sus finanzas.
"Básicamente, porque soy como un niño y no puedo llevar el control de todas esas cosas. Ella me manda un mensaje al final de cada semana diciéndome: 'Esto es lo que le estamos pagando a Ted', y yo solo digo: 'Eso está genial'", comentó con humor en una entrevista recogida por Daily Express.
Ted Scott, por su parte, también ha comenzado a diversificar sus actividades, no solo como caddie, sino también como profesor de golf a través de Internet. Aunque sigue desempeñando un papel crucial en la carrera de Scheffler, su éxito le ha permitido expandir su propio perfil profesional.