Brasil destapa una trama corrupta para comprar los JJOO de Río 2016
Fiscales brasileños denunciaron desvíos y sobornos millonarios vinculados con la elección de Río de Janeiro como sede de los Juegos Olímpicos de 2016.
5 septiembre, 2017 21:49Noticias relacionadas
Fiscales brasileños denunciaron desvíos y sobornos millonarios vinculados con la elección de Río de Janeiro como sede de los Juegos Olímpicos de 2016 y subrayaron el papel que jugó el presidente del Comité Olímpico Brasileño, Carlos Arthur Nuzman, en la operación.
Según los investigadores, Nuzman, como presidente del COB y miembro honorario del Comité Olímpico Internacional tuvo un desempeño fundamental para vincular a empresarios, políticos y directivos del COI en la presunta trama de compra de votos para que Río se hiciera con los Juegos de 2016. "Nuzman es elemento central que vincula a empresarios y representantes del COI", denunció la fiscal Fabiana Schneider.
Nuzman presta declaración ante la policía en el marco de la operación "Unfair play" (juego sucio) desplegada por la policía como parte de la operación Lava Jato.
La Fiscalía ha pedido que se embarguen sus bienes y se le retire el pasaporte para evitar que pueda abandonar el país. "Es innegable que Nuzman actuó de forma bastante presente y expresiva en el convencimiento de personas para que apoyaran a candidatura de Río de Janeiro", agregó la fiscal, que denunció que "los Juegos fueron usados como un trampolín para actos de corrupción de dimensión olímpica".
La operación es resultado de una investigación que desarrollan los fiscales brasileños con la Justicia francesa y que salpica también al exgobernador de Río Sergio Cabral, en prisión por corrupto, y a Papa Massata Diack, hijo de Lamine Diack, que entonces era el presidente de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) y miembro el COI.
Más de 10 millones de dólares
Según los fiscales, Cabral habría recibido al menos unos 10 millones de dólares a través de empresas interpuestas y de un testaferro, el empresario Arthur Cesar de Menezes, conocido como "el rey Arturo", quien supuestamente se encuentra en Miami y que está en busca y captura.
Además, estiman que al menos 2 millones de dólares fueron transferidos a cuentas y empresas vinculadas con Papa Massata Diack, a finales de septiembre, en vísperas de la votación que el 2 de octubre eligió a Río de Janeiro como sede de los Juegos Olímpicos de 2016.
Según la fiscal Schneider, Massata tenía un papel fundamental porque influía en los países africanos y "este grupo suele votar unido" en las elecciones olímpicas.
Además, señala que estaba ya envuelto en otros casos de corrupción vinculados a la elección de Tokio: "Aquella fue una operación menos sofisticada porque en Brasil tenemos mayor complejidad, con empresas interpuestas y nombres de terceros".
Cuando se anunciaron los Juegos para Río se alimentaron las expectativas de los avances que supondría la cita Olímpica para el futuro de la ciudad, pero lo cierto es que "muchas personas se valieron de las Olimpiadas para lucrarse", denunció la fiscal.