Carlos Alcaraz, el talentoso tenista español, tuvo un debut sin sobresaltos en la primera ronda del campeonato individual de tenis masculino en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde se enfrentó y venció al libanés Hady Habib con un cómodo 6-3 y 6-1, antes de hacer su otro debut con victoria en la tarde-noche del sábado junto a Rafael Nadal.
Sin embargo, un incidente curioso ocurrió antes de que comenzara el partido, cuando el árbitro del encuentro obligó a Alcaraz a dar la vuelta a su muñequera debido a las estrictas normas del Comité Olímpico Internacional (COI) sobre los logotipos comerciales.
El reglamento del COI prohíbe la exhibición de marcas comerciales en cualquier accesorio no esencial de los deportistas, permitiendo mostrar únicamente los logos en las vestimentas de juego, ya que estas forman parte del equipamiento obligatorio.
Alcaraz, quien suele portar una muñequera de Nike, se encontró con esta normativa por primera vez en su carrera olímpica. El árbitro le pidió que diera la vuelta a su muñequera para ocultar el logo de la marca, una medida que Alcaraz inicialmente discutió al considerar que el tamaño del logo en su muñequera era similar al de su camiseta.
Tras la explicación del árbitro sobre la normativa, Alcaraz cumplió con la solicitud, girando su muñequera para ocultar el logo de Nike y poder continuar usando la prenda.
Esta situación subraya las estrictas políticas del COI respecto a la publicidad y el patrocinio en los Juegos Olímpicos, asegurando que no haya exhibiciones comerciales más allá de lo permitido en los uniformes oficiales.
Este ajuste en su atuendo no pareció afectar el rendimiento de Alcaraz, quien sigue en la competición con la mirada puesta en el oro tanto en individual como en dobles, donde hace pareja con Rafa Nadal.
Ambos, vestidos con el equipamiento de Nike en sus partidos, deben también utilizar chándales de la marca Joma, la cual tiene contrato con el Comité Olímpico Español.