La selección femenina de waterpolo ya está en las semifinales del torneo olímpico. Las pupilas de Miki Oca arrasaron de una manera impresionante en su partido de cuartos de final ante Canadá y están a tan sólo un paso de asegurar una nueva medalla para el equipo español en los Juegos Olímpicos de París.

Desde que el waterpolo femenino español se hizo un sitio en los Juegos Olímpicos allá por Londres 2012, se ha convertido en un foco habitual de alegrías para el deporte nacional. Pocas selecciones hay más fiables que esta, y de nuevo han vuelto a demostrarlo porque siguen en la pelea por las preseas. 

España se impuso con muchísima contundencia a una Canadá que en ningún momento fue un rival a la altura. El 2-6 con el que se cerró el primer cuarto no hizo sino corroborar el favoritismo de las españolas, que con el resultado a favor encontraron la confianza necesaria para ir abriendo la brecha cada vez más hasta límites escandalosos. 

Tanto fue así, que el partido quedó visto para sentencia ya al término de la primera mitad. Las chicas de Miki Oca se marcharon con un claro 4-10 arriba tras el segundo cuarto, así que tan sólo quedaba disfrutar del escenario y del momento en la segunda parte. 

Lejos de reaccionar tras el tiempo de descanso, Canadá se atascó en la anotación y fue incapaz de anotar ni un solo tanto en el tercer cuarto. Eso lo aprovechó España para dispararse más todavía con el 4-13 que hacía rozar los dobles dígitos de diferencia.

No había más historia. Con todo decidido, en el último cuarto la Selección siguió su festín goleador hasta rozar los 20 goles, una cifra escandalosa para tratarse de unos cuartos de final de los Juegos Olímpicos. La aportación de Elena Barril, Paula Crespí o Bea Ortiz en la anotación fue sencillamente espectacular y capital para una goleada tan amplia.

España ya está en las semifinales y no tiene miedo a hablar abiertamente de la medalla de oro. Está a tan sólo dos partidos de conseguirlo.

Garantía de medallas

El waterpolo femenino ha sido desde que pisó por primera vez unos Juegos Olímpicos sinónimo de medalla. La hornada de jugadoras sigue siendo inagotable y pese al paso de los años el equipo nacional se sigue manteniendo en lo más alto.

Ya en Londres 2012, en su debut en una cita olímpica, la selección femenina consiguió sacar la medalla de plata. Llegó a la final y allí compitió contra Estados Unidos, pero las norteamericanas fueron superiores y terminaron haciéndose con el oro. 

Tras no llegar al podio en Río 2016, en los Juegos de Tokio 2020 la selección femenina de waterpolo volvió a tocar metal. Otra vez más llegó a la final y otra vez tropezó con Estados Unidos. El mismo desenlace que en 2012, por lo que España tiene una espina clavada con esta disciplina.

Ahora hablan sin tapujos de ir a por el oro en París. Maica García, en conversación con EL ESPAÑOL, ha confesado estar preparada para conseguir el máximo reconocimiento al fin: "No me gusta decirlo, pero el oro es una obsesión para mí. Estamos más listas que nunca".