La boxeadora taiwanesa Lin Yu-Ting ha estado en el centro de una controversia debido a cuestionamientos sobre su género, lo que culminó con un incidente reciente en el cuadrilátero que ha provocado intensos debates.
Tras el combate que clasificó a la taiwanesa para la final de su categoría (57 kg femenino), su oponente, la turca Esra Yildiz Kahraman, realizó un gesto en forma de "X" con los dedos, similar al que hizo previamente una rival búlgara, desatando especulaciones sobre su significado.
El gesto de "X" ha sido interpretado como una insinuación sobre el género de Lin Yu-Ting, quien ha estado bajo escrutinio debido a acusaciones de tener cromosomas XY de género masculino.
Aunque Yildiz mostró respeto hacia Yu-Ting durante el combate, ayudándola a salir del ring, también realizó la señal de 'X' después de la pelea, lo que generó controversia. Al ser preguntada sobre el gesto, Yildiz optó por no hacer comentarios.
El simbolismo detrás de la 'X' parece estar relacionado con los cromosomas: los hombres tienen un cromosoma X y uno Y, mientras que las mujeres tienen dos cromosomas X. Esta insinuación ha reavivado las dudas sobre la elegibilidad de Yu-Ting y de otra boxeadora, la argelina Imane Khelif, quienes han enfrentado cuestionamientos similares.
La trayectoria de Lin Yu-Ting
Lin Yu-Ting ha demostrado ser una boxeadora formidable, avanzando a las finales de la categoría femenina de 57 kg en los Juegos Olímpicos de París 2024. A pesar de las críticas y las pruebas de elegibilidad de género, llevadas a cabo por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), que fallaron el año pasado, tanto ella como Khelif han continuado compitiendo, respaldadas por las decisiones del Comité Olímpico Internacional (COI).
El COI ha defendido la participación de ambas boxeadoras, afirmando que las acusaciones de discriminación intentan socavar su moral. Lin Yu-Ting y Khelif han sido reconocidas como mujeres desde su nacimiento y han competido como tal durante años. Las pruebas adicionales realizadas por Taiwán confirmaron la elegibilidad de Yu-Ting para los Juegos Olímpicos.
Las acusaciones contra las boxeadoras han generado una amplia gama de reacciones. Figuras públicas como Donald Trump, Elon Musk o J. K. Rowling y atletas como Sharron Davies y Nicola Adams se han pronunciado en contra de su participación, alegando que es injusto para las competidoras femeninas. Sin embargo, el COI y otras organizaciones han condenado la campaña de odio en línea dirigida a las deportistas.
A pesar de las controversias, Yu-Ting y Khelif han mantenido su enfoque en el deporte, avanzando hacia las finales y demostrando su habilidad en el cuadrilátero. El COI, que asumió el control del boxeo en los Juegos de París debido a problemas de gobernanza en la Asociación Internacional de Boxeo, ha reiterado su apoyo a las atletas basándose en reglas de género vigentes desde Río 2016.
Además, el presidente del COI Thomas Bach salió en defensa de Lin Yu-Ting e Imane Khelif.
"Son dos boxeadoras que nacieron mujeres, que crecieron como mujeres, que tienen pasaporte de mujeres y que han competido muchos años como mujeres", dijo el responsable del movimiento olímpico, denunciando "una guerra cultural" de los que quieren apropiarse "de la definición de lo que es una mujer".