Los Juegos Olímpicos de París se han encontrado este viernes con una mala noticia que nadie tiene que ver con el deporte. Un luchador que forma parte de la delegación olímpica de Egipto fue detenido durante la pasada madrugada acusado de haber cometido delito de agresión sexual.

Al parecer, el luchador egipcio le tocó el trasero a una mujer en plena madrugada en una cafetería de la capital parisina, un hecho por el que la afectada ha interpuesto una denuncia, tal y como informó la Fiscalía. 

La detención del deportista se produjo en torno a las cinco de la madrigada en el café Oz, y algunos medios franceses como Le Parisien han indicado que el atleta iba en ese momento completamente borracho.

Eso sí, las autoridades no han dado a conocer el nombre del deportista egipcio que ha sido detenido por esta presunta agresión sexual. Un hecho que, sin duda, empaña a toda la delegación olímpica egipcia y también el espíritu olímpico. 

En cualquier caso, no es la primera agresión sexual que se haya conocido relacionada con los Juegos Olímpicos de París desde que arrancaron el pasado 26 de julio y que terminan este domingo.

El padre de la croata Barbara Matic, campeona olímpica de judo en la categoría de menos de 70 kilos, fue arrestado el pasado día 1 de agosto por dar un beso no consentido a una voluntaria justo después de que su hija lograra alzarse con la medalla de plata. Finalmente ese asunto ha sido archivado por la Justicia.

En aquel caso, el hombre se encontraba en una zona no autorizada y, fruto de la emoción de ver a su hija proclamarse campeona olímpica, se abalanzó sobre la voluntaria y posteriormente salió corriendo. La voluntaria acudió a la Policía para contar lo que había sucedido, por lo que se dio la detención del padre de Matic. 

La joven alegó que el padre de la judoca le propinó "un beso no consentido", un hecho que además fue confirmado por un testigo que se encontraba allí en aquel momento.