Álex Dujshebaev, durante el partido ante Alemania en semifinales.

Álex Dujshebaev, durante el partido ante Alemania en semifinales. REUTERS.

Juegos Olímpicos

Los Hispanos claudican ante Alemania y quedan relegados a la pelea por la medalla de bronce en los JJOO

El combinado de Jordi Ribera cae (25-24) en un partido igualado y deja escapar la primera final olímpica de su historia. 

9 agosto, 2024 17:59

Los Hispanos chocan, una y otra vez. Contra un muro alemán abanderado por Wolff en particular y contra su destino en general. Caen con Alemania (25-24) en semifinales y tendrán que esperar cuatro años para desprecintar una final olímpica que se le resiste al combinado de Jordi Ribera, campeón del resto de torneos continentales y mundiales. [Así hemos vivido la derrota de España contra Alemania].

Un partido que, al igual que el de Egipto, lo empezaron de manera legañosa, con las sábanas pegadas y yendo a remolque en todo momento para acabar claudicando tras una montaña rusa de emociones. Del adormecimiento inicial al chasco final. "No firmo repetir el bronce de Tokio, sólo el oro", aseguró Dujshebaev en una conversación con EL ESPAÑOL. 

Deberá esperar cuatro años más. Parecía imposible superar a Alemania, pero también lucía así el escenario para llegar a semifinales porque España llegó a estar eliminada en varios momentos ante Egipto, pero sacó el carácter. Indomable para los africanos, también para los teutones, que no lograron domesticar a un equipo salvaje y superviviente a cualquier guion.

"Al final hay que buscar el gol", arengaba el jugador español cuando restaban ocho minutos para el final y su equipo, por primera vez, tomaba ventaja en el marcador tras un encuentro a remolque. Por falta de acierto intermitente, pero especialmente por un Wolff inmenso. Sus dimensiones se multiplicaban con cada acercamiento español.

Fue la base del triunfo alemán, que podía permitirse ciertas licencias en ataque porque en defensa tenía levantado un muro. A España le quedaba la épica. Establecida como rutina, los Hispanos estuvieron a punto de volver a sobrevivir y resurgir como venían haciéndolo durante todo el torneo. 

Odriozola anota un gol ante Wolff.

Odriozola anota un gol ante Wolff. REUTERS.

Justo al acabar el encuentro lloraban los más jóvenes, quienes nunca había vivido tan desagradable experiencia, mientras los alemanes se abrazaban a su portero, Andreas Wolff, héroe absoluto. España vivió del trabajo colectivo y Alemania lo hizo de su guardameta, 22 paradas de 45 lanzamientos.

Además, emergió en el momento crucial. Detuvo los últimos cuatro lanzamientos de la selección para desesperación de todos, especialmente del pivote Javi Rodríguez. España tuvo el billete a la final en su mano, pero no aprovechó la oportunidad. Hasta dos veces Rodríguez se estrelló contra Wolff y los lanzadores alemanes no perdonaron.

Otra vez el techo será el bronce

Un gol de JuriKnorr a falta de dos minutos para el final desequilibró el duelo y ya no hubo más. La selección se jugará el bronce, el quinto bronce de su historia, contra el perdedor del duelo entre Dinamarca y Eslovenia. En principio, los daneses son muy favoritos, por lo que el combinado esloveno oposita a rival. 

En cualquier caso, el desempeño de los de Jordi Ribera ha sido descomunal. Se levantaron para superar la fase de grupos con una remontada ante Croacia; sobrevivieron a la ruleta rusa ante Egipto en cuartos y ante Alemania iban por el mismo camino. Cambió el destino final y deja a los Hispanos ante su límite olímpico: el bronce.