El saltador de plataforma británico Tom Daley anunció este lunes su retirada de las piscinas después de lograr la medalla de plata en los Juegos Olímpicos de París. A sus 30 años dice adiós a una carrera deportiva extraordinaria.

"Fue muy emotivo al final, allí arriba en la plataforma, saber que iba a ser mi último salto competitivo, pero tenía que tomar la decisión en algún momento y siento que es el momento adecuado", dijo Daley a la revista Vogue británica.

"Es muy, muy surrealista. Me sentía increíblemente nervioso sabiendo que eran mis últimos Juegos Olímpicos. Había mucha presión y expectativas, estaba deseando que terminara, pero cuando salí y vi a mi marido (Lance), a mis hijos (Robbie y Phoenix), a mis amigos y a mi familia entre el público, pensé: '¿Sabéis qué? Esto es exactamente por lo que lo hice'. Fue emocionante el final, allí en la plataforma, sabiendo que iba a ser mi última inmersión competitiva", reconoció.

Daley indicó en la entrevista que tenía claro que debía de "tomar la decisión en algún momento". "Ahora creo que es el momento adecuado, es el momento adecuado para dejarlo", sentenció.

Máxima élite

Con Tom Daley se despide una parte muy importante de la disciplina de salto de plataforma de los últimos años. El británico ha participado en todos los Juegos Olímpicos desde Pekín 2008 y en cuatro de ellos se ha ido con una medalla colgada del cuallo. Su balance, tres bronces, una plata y una presea de oro.

Daley deja un gran legado a nivel olímpico, pero también lo hace en campeonatos del mundo y de Europa. Allí también ha sido dominador en el salto de plataforma de 10 metros, en sincro y en mixto. En su haber tiene ocho medallas de campeonatos del mundo y otras ocho en Europeos.

Ha dominado su disciplina como nadie y se retira en lo más alto. Brilló en París. No le pudo la presión a pesar de ser conocedor de que estaba ante su último salto como profesional. Lo clavó, algo habitual en él, y se marchó de la élite por la puerta grande.