Fernando Alonso necesita un milagro para conseguir un asiento en Fórmula 1 la temporada 2020

Desde que dejó la Fórmula 1 a finales de 2018, el regreso de Fernando Alonso al Gran Circo es un rumor constante a pesar de que ni el asturiano ni ningún equipo han dado pasos públicos en ese sentido. Desde el primer día, el piloto español ha dejado claro sus requisitos para volver: un coche ganador desde el primer día.

A pesar de la importante mejora de McLaren durante este 2019 con Carlos Sainz y Lando Norris a los mandos, el proyecto de la escudería de Woking no parece encajar en los requisitos de Alonso. Además, desde el fracaso en las 500 Millas de Indianápolis, la relación entre el equipo británico y el piloto parece mucho más fría.

La llegada de Andreas Seidl a la dirección del equipo de Fórmula 1 ha cambiado a McLaren por completo. Una de sus primeras decisiones en cuanto a pilotos fue la de eliminar a Fernando Alonso como reserva esta temporada y poner en su lugar Sergey Sirotkin, que acometerá esta función en Renault y en el equipo británico.

Por si fuera poco para, la última decisión de Seidl y McLaren ha sido la de renovar a Sainz y Norris de cara a la temporada 2020, acallando todos los rumores sobre la posible vuelta de Alonso de un portazo. Los de Woking tienen clara la ruta que quieren tomar. La ausencia del asturiano les ha ayudado esta temporada a perder parte del foco mediático, algo que les permite trabajar con más comodidad.

El abanico de Ferrari

Este año, la silly season, nombre con el que se conoce en la Fórmula 1 a la época del año en la que se negocian los asientos de las diferentes escuderías para la siguiente temporada, se avecina de infarto. Al margen del futuro de Fernando Alonso, otros pilotos importantes de la actual parrilla dudan sobre en qué equipo estarán en 2020.

Uno de los casos más mediáticos, y que puede provocar un efecto dominó que afectaría a Fernando Alonso, es el de Sebastian Vettel. Ferrari y el alemán tienen contrato hasta finales de la próxima temporada pero la crisis de resultados del piloto puede pasarle factura. La escudería italiana tiene a su disposición en el mercado un abanico de pilotos muy importante para sustituirle.

Una de las opciones que más está sonando es la llegada de Max Verstappen. El holandés es uno de los pilotos de moda en Fórmula 1 y ya ha manifestado en varias ocasiones que la próxima temporada quiere tener un coche ganador, exigiendo a Red Bull que dé un paso adelante tras su reciente alianza con Honda.

Si Ferrari opta por dar continuidad a Vettel o apostar por Verstappen, la llegada de Fernando Alonso al equipo italiano es prácticamente imposible puesto que el otro asiento parece seguro para Charles Leclerc. Con las puertas cerradas de Ferrari y McLaren, el futuro del asturiano dependería de dos equipos: Mercedes y Red Bull.

En el caso de la escudería alemana, el asiento de Bottas es el único que está en duda aunque es complicado imaginarse a Hamilton y a Alonso volviendo a compartir box 13 años después de que coincidieran en McLaren. Además, Mercedes mantiene en la reserva a Esteban Ocon. El francés trabaja como piloto de desarrollo desde esta temporada pero quiere volver a la parrilla la próxima. La bajada en el rendimiento de Valtteri le puede un hueco la escudería más potente en la era híbrida de la Fórmula 1.

Red Bull, misión imposible

Con todo esto, las miradas se centran en Red Bull. La escudería austriaca puede ser la agitadora del mercado 2020. Si no logran retener a Max Verstappen, la marca de bebidas energéticas tendría dos asientos libres para la próxima temporada, puesto que el futuro de Pierre Gasly parece sentenciado, incluso antes de finalizar este año, y el regreso de Daniil Kvyat sería visto solo como un mero parche.

Con este panorama Red Bull podría intentar una gran operación. La más sencilla de llevar a cabo sería recuperar al hijo pródigo. Si Vettel deja Ferrari su destino más probable es volver a la escudería con la que conquistó cuatro títulos mundiales entre 2010 y 2013. Las opciones para subirse al otro asiento del equipo austriaco son varias: Alonso, Bottas, Ocon, Sean Gelael...

Los casos de Bottas u Ocon serían una apuesta por un segundo piloto competitivo pero que no hiciera sombra a un Vettel que sería líder indiscutible del equipo. Algo parecido a si apuestan por el joven Sean Gelael, el indonesio que ya se ha subido al coche en algunos test. Pero en el caso de que Red Bull apueste por Alonso tendría que gestionar con mucho cuidado la convivencia de dos 'gallos' en el mismo box.

Aunque parece una operación muy difícil la verdad es que el primer paso ya ha sido realidad. "El entorno de Alonso nos ha hecho saber su disponibilidad", ha desvelado esta semana Helmut Marko, jefe de Red Bull, en una entrevista en motorsport.com. La relación entre Fernando Alonso y el equipo austriaco nunca ha sido muy fluida desde que en 2008 les dejara en la estacada para volver a Renault tras abandonar McLaren.

Por si fuera poco, y como ha reconocido el propio Marko, la alianza actual entre Red Bull y Honda complica aún más la llegada de Fernando Alonso. El asturiano fue uno de los más críticos con el fabricante japonés durante los tres años que fueron el motorista de McLaren. Una ruptura que se ejemplificó en la última edición de las 500 Millas de Indianápolis, McLaren y Alonso apostaron por Chevrolet a pesar de que Honda les ofreció un gran rendimiento en su participación en la prueba de 2017. 

Con este panorama en el paddock de la Fórmula 1, el futuro de Fernando Alonso parece cada vez más lejos del Gran Circo. Sin un asiento posible en McLaren, Mercedes, Ferrari o Red Bull la exigencia del asturiano de volver para ganar no se cumple de cara a 2020.

Las opciones de Fernando Alonso pasan por esperar a la temporada 2021, un año esperado por muchos dentro de la Fórmula 1. La FIA lleva varios años preparando un gran cambio de reglamento con el objetivo de igualar la competición y permitir que más coches puedan luchar por las victorias, algo que permitiría al asturiano contar con más opciones para fichar por un equipo ganador.

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