Casi un año después de que Fernando Alonso anunciara que dejaba la Fórmula 1 para afrontar nuevos proyectos durante la temporada 2019, el asturiano ha cerrado la puerta de su regreso en medio de un aluvión de rumores que le subían a uno u otro asiento de la parrilla.
La Fórmula 1 vive sus semanas más ajetreadas del año en lo extradeportivo. Los principales equipos de la parrilla han comenzado el baile de negociaciones para renovar o fichar a pilotos de cara a la próxima temporada.
La vuelta de Fernando Alonso, el futuro de Sebastian Vettel o el de Max Verstappen condicionaban todas las quinielas sobre la parrilla de pilotos en 2020. El autodescarte del asturiano aclara algo más los posibles movimientos pero deja la incógnita de por qué el dos veces campeón del mundo ha vuelto a decidir dejar de lado el Gran Circo.
"Tengo una idea clara de lo que voy a hacer, no dejo puertas abiertas ni estoy esperando o buscando que me llame nadie. Siempre he elegido dónde y cuándo quería correr, porque me muevo en base a lo que me hace feliz. Lo que haga en el futuro está en mi cabeza y se sabrá a su debido tiempo", explicó el Fernando Alonso que se encuentra en Asturias presentando actos de su Fundación.
"En los últimos años, lo que pueda ofrecerme a nivel personal no me resulta lo suficientemente atractivo. Fue una etapa excepcional, pero a día de hoy no encuentro en la Fórmula 1 los retos que puedo conseguir fuera de ella", aclaró el propio piloto, que echa de menos más acción en una competición dominada por Mercedes.
Sin asiento en F1
Desde que se fue, Fernando Alonso ha dejado claro que la única condición para volver a la Fórmula 1 era tener un coche competitivo desde el primer momento. A día de hoy, las únicas escuderías que pueden satisfacer los deseos del asturiano son Mercedes y Ferrari y parece que ambas cuentan con otras cartas sobre la mesa de cara a 2020.
Lewis Hamilton domina con mano de hierro Mercedes y un reencuentro con el asturiano es difícil de imaginar 13 años después. Aunque muchos dudan de la continuidad de Valtteri Bottas, la escudería alemana se guarda la opción de promocionar al francés Esteban Ocon, actualmente piloto de pruebas en el equipo.
El caso de Ferrari es muy diferente. La escudería italiana debe decidir en los próximos meses si cuenta con Sebastian Vettel o no para la próxima temporada. El piloto alemán tiene un año más de contrato pero su bajo rendimiento en el último año ha reabierto el debate sobre su continuidad.
El asiento de Vettel en Ferrari puede desencadenar un efecto dominó que de un vuelco a la parrilla. Si el alemán deja la escudería italiana son varios los candidatos a ocupar su puesto. Tras descartarse Fernando Alonso, Max Verstappen es el mejor candidato en la parrilla actual aunque sus últimos duelos con Charles Leclerc sobre la pista hacen pensar que sería complicado verlos juntos en el box la próxima temporada.
Otro aspirante a sustituir es Valtteri Bottas. El finlandés quiere continuar en Mercedes: "Creo que le he demostrado al equipo que merezco quedarme. Pero tendremos que esperar algunas carreras más", aseguró la pasada semana aunque no cerró la puerta a poder salir, ocasión en la que dejó claro donde le gustaría ir: "Si tengo que dejar Mercedes me gustaría estar en el equipo que está en segundo lugar. Y ese equipo es Ferrari".
La puerta sigue abierta
Lo que parece claro es que el nuevo portazo de Alonso a la Fórmula 1 no es definitivo. El asturiano es consciente de que las nuevas reglas que entraran en vigor la temporada 2021 tienen como objetivo igualar la competición y acabar con el actual monopolio de Mercedes en la era híbrida.
Otro motivo para descartar la F1 en 2020 es que Alonso parece haber tomado la decisión de esperar a 2021. Será el próximo año cuando conozca como avanzan los trabajos de adaptación al nuevo reglamento en Mercedes, Ferrari, Red Bull o McLaren. Además el baile de pilotos puede ser más intenso puesto que Vettel termina su contrato en Ferrari y si Verstappen sigue en Red Bull con las mismas prestaciones forzará seguro su salida.
McLaren ha desmentido que haya roto el contrato con Alonso y, aunque la primera decisión de Andreas Seidl, nuevo jefe de la escudería británica en Fórmula 1, haya sido quitarle el cargo de piloto reserva al español, justo antes de confirmar a Sainz y Norris como pilotos para 2020, los de Woking no pierden la esperanza de volver a ver a Fernando al volante de uno de sus coches.
El problema del regreso segundo regreso de Alonso a McLaren es que la escudería aún tiene un largo camino por delante. La temporada 2019 está siendo muy satisfactoria y parecen haberse consolidado en la zona alta de la 'clase media' pero Mercedes, Ferrari y Red Bull aún están lejos. Si los de Woking vuelven a dar otro gran paso adelante en 2020 y aciertan con la adaptación al nuevo reglamento, el asturiano podría tener en bandeja su vuelta al Gran Circo.
Al margen de todos los movimientos en Fórmula 1, y tal y como ha confirmado el propio Alonso, la decisión está motivada porque aún tiene grandes retos que afrontar lejos de la Fórmula 1. El Dakar 2020 parece el gran objetivo del asturiano. "Es una carrera atractiva, la más importante, pero también opuesta a mis cualidades o manera de conducir. Nunca lo he hecho en tierra y hacer el más duro del mundo de repente sería algo extremo", explicó esta semana.
Alonso ya explicó su calendario para el resto del 2019 pero del 2020 solo se sabe el 'no' a la Fórmula 1. El asturiano ha asegurado que "lo que haga en el futuro está en mi cabeza y se sabrá a su debido tiempo", con lo que solo cabe esperar para conocer con qué sorprenderá el dos veces campeón de F1 a sus fans para el próximo año.