El español Fernando Alonso, que este sábado debutó, con su compatriota Marc Coma como copiloto y a bordo de un Toyota Hilux, en el Rally de Marruecos, en una primera etapa en la que sufrieron tres pinchazos y perdieron 44 minutos, declaró que esperaban un "comienzo mejor" que "al final no fue tan negativo".
"Esperábamos un comienzo mejor o más tranquilo, pero al final no fue tan negativo; porque, al menos logramos llegar hasta aquí", explicó el doble campeón del mundo asturiano de Fórmula Uno, que este año, después de repetir triunfo en las 24 Horas de Le Mans (Francia), ganó el Mundial de Resistencia (WEC) y que compite en el Rally de Marruecos como banco de pruebas con miras a una hipotética participación en el Rally Dakar, que se disputará en enero en Arabia Saudí.
"Tuvimos diversos problemas y hubo un momento en el que nos quedamos sin una rueda, porque sufrimos hasta tres pinchazos. Tuvimos que esperar a otro Toyota, que por suerte sí tenía una rueda para dejarnos", explicó Alonso, de 38 años.
La siguiente jornada, mejor
"Y, en líneas generales, se puede decir que fuimos razonablemente afortunados por haber acabado, aunque, obviamente, no en la posición en la que nos hubiera gustado", explicó el ovetense, en declaraciones difundidas este sábado por su escudería.
"Esto lo determinó el orden de salida. Cuando sales tan atrás estás abocado a acabar lento; porque te encuentras con mucho polvo de todos los coches que tienes por delante", precisó Alonso este sábado en tierras marroquíes.
"Hay que tomarlo con calma. Mañana también será un día difícil, con dunas; pero ya tengo ganas de que llegue la jornada de mañana", comentó el genial piloto asturiano después de la primera etapa del Rally de Marruecos.
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