La temporada 2020 de la Fórmula 1 es aún una incógnita. El último deseo de Chase Carey, CEO de la competición, ha sido empezar el 3 de julio en el circuito RedBull Ring de Austria, el primero de los "entre 13 y 15 Grandes Premios" que tendría esta temporada exprés que acabaría en Baréin y Abu Dhabi.
Con lo deportivo parado, los equipos se afanan en trabajar en el futuro. Tras la decisión de congelar el cambio de reglamento técnico, la Fórmula 1 afronta una temporada 2021 con pocas novedades tecnológicas y parece que todas estas estarán en los boxes y en los posibles cambios de asientos.
El mercado de pilotos de cara a 2021 espera a un piloto: Sebastian Vettel. El alemán es la pieza clave en todos los movimientos que se pueden producir. Su contrato de cinco temporadas acaba a finales de este año y la renovación con Ferrari no va por buen camino. Los de Maranello quieren que el cuatro veces campeón del mundo se baje el suelo de forma radical y, según los rumores que llegan desde Italia, no le ofrecen nada más que un año de contrato.
Ante este panorama, muchos ven complicado que Vettel continúe en Ferrari algo que provocaría un efecto dominó que podría dejar muchos beneficiados y algunos perjudicados. Charles Leclerc es uno de los grandes ganadores si el alemán abandona Maranello. El monegasco arrancaría 2021 con la más que probable vitola de piloto número uno en el equipo ya que pocos apuestan porque la escudería italiana supla la baja de Vettel con la de otro gran piloto de la altura de Hamilton, Verstappen o incluso Fernando Alonso.
Carlos Sainz
Carlos Sainz da el perfil
Sky Sport Alemania apuntaba estos días la posibilidad de aprovechar esta falta de entendimiento en la renovación de Vettel para beneficiar un trueque entre Ferrari y McLaren que acabaría con Carlos Sainz de rojo y el alemán enfundándose el naranja papaya de los de Woking.
Sainz ha hecho mérito a lo largo de su último año al frente de McLaren. El piloto madrileño ganó muchos puntos de popularidad dentro del paddock gracias a su podio en el Gran Premio de Brasil y a finalizar el Mundial por delante de Pierre Gasly y Alexander Albon.
La dupla Leclerc - Sainz aportaría además la calma que los de Maranello llevan tiempo buscando y por si fuera poco se convertirían en una de las duplas más jóvenes de los equipos punteros de la parrilla (22 y 25 años respectivamente).
Vettel en el GP de Rusia
Aunque encaja en el perfil, Sainz aún depende de la decisión de Sebastian Vettel. El alemán tiene ante sí la oportunidad de buscar un nuevo equipo que satisfaga mucho más sus pretensiones contractuales o renovar a la baja una temporada más con Ferrari para esperar y ver cómo es el panorama en Maranello de cara a 2022 y el nuevo reglamento técnico.
Lo que sí que parece una opción razonable es que Vettel pueda encajar en el nuevo proyecto alemán de McLaren. Los de Woking recuperan su alianza con Mercedes el próximo año para montar sus motores en el próximo monoplaza y desde 2019 la mano dura de Andreas Seidl dirige el nuevo rumbo del equipo.
Las opciones de Alonso
Si Vettel sale al mercado y Ferrari desoye los cantos de sirena de otros pilotos como Daniel Ricciardo o Antonio Giovinazzi, que tienen en su contra: su edad y su bajo nivel en Sauber, respectivamente, Sainz parece la mejor opción. Con las puertas cerradas para Fernando Alonso de Mercedes y RedBull, dominados por Lewis Hamilton y Max Verstappen, el asturiano tendría que enfrentarse con Sebastian por un puesto en McLaren.
Ante la salida de Sainz, los de Woking contarían solo con el incipiente talento de Lando Norris, pero el británico no parece suficiente para afrontar la tarea de exprimir un nueva nueva unidad de potencia como la de Mercedes y optimizar todo el trabajo en pista que habrá que hacer durante los test invernales.
Fernando Alonso, celebrando una victoria con Ferrari
La opción de Vettel o Fernando Alonso son las mejores para los de Woking, pero quizás la batalla se presenta complicada para el asturiano. Es difícil pensar ver a ambos pilotos compartir box y también es complicado imaginarse a Sebastian dejar Ferrari sin antes haber cerrado su próximo destino, es decir, la operación es la pescadilla que se muerde la cola: si Vettel no tiene un puesto asegurado en Ferrari no se irá y Sainz tampoco dejará libre su plaza en McLaren, complicando muy mucho el regreso de Fernando Alonso a la Fórmula 1 un año más.
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