Hace unos días se hizo oficial el fichaje de Carlos Sainz por Ferrari de cara al 2021. Tras su gran año en McLaren, la escudería italiana remplazaba así a Vettel con el piloto español.
En principio, Sainz estará por detrás de Leclerc. El monegasco es la gran apuesta de Ferrari de cara al futuro y su gran año con la escudería italiana hizo que fuese renovado. Pero todo se verá en la pista.
Con el monegasco con contrato hasta 2024, Sainz firmó por dos años, y postulado como su mejor baza para asaltar el título, parece que el papel del madrileño en la fábrica italiana se adapta al de actor secundario. Pero no existe ninguna cláusula que diga que esto sea así y está claro que Carlos Sainz saldrá a luchar desde la primera carrera para ser el número uno en Ferrari.
Rob Smedley, ingeniero de pista de F1 muchos años y de Felipe Massa en Ferrari, estuvo en la escudería italiana entre 2004 y 2013. El ex de Ferrari ha revelado cómo era su vida ahí y ha aconsejado a Carlos Sainz sobre la forma en la que podrían triunfar en una de las mejores escuderías de la historia de la Fórmula 1.
"Mi consejo es que deje crecer una piel gruesa. Una piel muy gruesa. Lo va a necesitar. Es una gran experiencia si puedes soportarlo, y puedes soportar la prueba del tiempo allí. No conozco muy bien a Carlos, pero parece un tipo que podrá llevarse bien en ese entorno. Le va a encantar", comentó en el podcast de F1 Nation.
Su experiencia en Ferrari
"Para muchos de nosotros que estuvimos mucho tiempo allí, Ferrari se convierte en una parte de ti. Y hay cosas maravillosas, realmente sorprendentes, sobre Ferrari, y algunas cosas realmente terribles sobre Ferrari. Y además ves con bastante frecuencia, especialmente cuando llegas a posiciones más altas, ambas caras de esa moneda", dijo.
"Hay días que piensas '¿por qué querría dejar este lugar?' y luego hay otros momentos en que se vuelve más difícil y un poco más frustrante. Y eso es a diario. Si aprendí algo de mi tiempo en la Fórmula 1, es que en Ferrari el segundo mejor nunca es lo suficientemente bueno. Es una cultura que también se ha construido en Mercedes ahora. Y la belleza de Ferrari es que siempre se trata de Ferrari, nunca se trata de individuos. Y son implacables y despiadados en su búsqueda de ganar", manifestó.
"Ferrari es una institución nacional, es una religión y, por lo tanto, esa presión nunca desaparece, ni por los medios ni por los aficionados. Incluso cuando sales de la oficina y puedes ir a un restaurante o una pequeña cafetería o lo que sea, ni siquiera tienes que estar cerca de Maranello, la gente sabe quién eres y te dará su opinión clara sobre lo que piensan sobre Ferrari y lo que piensan de ti. Pero al mismo tiempo, es un lugar absolutamente increíble para trabajar: la pasión y ser parte de eso, especialmente para los miembros del equipo de carreras", finalizó.