La piloto española Laia Sanz ha comunicado una dura noticia que conocían muy poquitas personas, solo su entorno más cercano y que lleva fastidiándole los últimos meses de su vida y de su carrera profesional. La mejor piloto de trial y enduro en España de la historia padece una importante enfermedad que está condicionando su preparación para el próximo Dakar, el cual comenzará el 3 de enero.
Laia ha comunicado que padece la enfermedad de Lyme, una enfermedad bacteriana que se contrae por la picadura de una garrapata. Se trata de una enfermedad muy difícil de detectar debido a que los síntomas que produce son muy similares a los de otras enfermedades. Los más comunes son sarpullidos en la piel, dolores de cabeza, fatiga y fiebres.
La propia piloto ha confesado que todo se desarrolló tras el confinamiento, cuando empezó a encontrarse mal y a padecer algunos de esos síntomas, pero los médicos no daban con la solución a lo que sufría. Sin embargo, después de un tiempo, le comunicaron que su problema se trataba de la enfermedad de Lyme.
Esto fue hace unos meses, pero evidentemente no ha trascendido públicamente y ha sido ella quien lo ha dado a conocer para informar a todos sus aficionados y a todos los apasionados del motor y del Rally Dakar. Laia tiene el honor de ser la mejor piloto de la historia en la disciplina de motos, habiendo coleccionado los mejores resultados de siempre en una prueba en la que no hay distinción de sexos, a pesar de que siempre se considera a la primer mujer clasificada como la ganadora del Dakar en féminas.
Mejorando poco a poco
La catalana ya se encuentra en Dubái junto al resto de su equipo donde está preparándose para el comienzo del rally más extremo y exigente del mundo. Aunque confiesa que esta condición no es la idea para iniciar un reto tan importante como un Rally Dakar, asegura encontrarse ya mucho mejor y estar preparada para afrontar la dureza de la prueba.
Además, Laia ha confesado que todavía se encuentra tomando antibióticos para combatir esa enfermedad y recuperarse lo antes posible, y ha querido mostrar su más sincero agradecimiento a todo su equipo y a todos sus patrocinadores que le han apoyado en estos momentos tan complicados, momentos que ya está muy cerca de superar. El reto del Dakar y la competición son más poderosos que cualquier enfermedad para ella.
Su gran objetivo es llegar a la salida de la prueba que comenzará en la ciudad de Jeddah en las mejores condiciones posible para afrontarlo con las mejores garantías. La enfermedad de Lyme, en sus versiones más graves, puede llegar a afectar a las articulaciones, al corazón y al sistema nervioso. Sin embargo, Laia confía en que todo vaya hacia delante, en poder ir encontrándose cada vez mejor y en que este contratiempo no la detenga en su objetivo de seguir haciendo historia en la prueba más exigente del mundo del motor en la que Laia es una de las ruedas a seguir en la especialidad de motos.
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