Marc Márquez se encuentra ya en la recta final de su recuperación tras haberse sometido a tres operaciones para corregir y poder curar su fractura de húmero, esa que se produjo en el Gran Premio de Jerez del año pasado. El ilerdense ha estado fuera desde la primera carrera de la última temporada y no ve la hora de poder volver a subirse a la Honda.
El corredor español no ha podido estar en los test de pretemporada que se han realizado en Catar y no ha podido sacar partido de las mejores que presenta la Honda para el 2021, y han tenido que ser Pol Espargaró, su nuevo compañero, y Stefan Bradl, piloto probador, quienes exprimieran la montura japonesa por las curvas y rectas de Losail.
Sin embargo, más que el rendimiento de la moto, lo que más le importa a Marc Márquez es recibir el visto bueno definitivo para poder volver a competir. Todavía no sabe cuándo podrá hacerlo, pero ya no descarta cualquier fecha, incluso poder estar en el arranque de la temporada, también en Catar.
De conseguirlo sería un hito casi histórico, una recuperación increíble, prácticamente milagrosa. En el momento de someterse a su tercera operación, los médicos empezaron a valorar cuánto duraría su proceso de readaptación hasta poder volver a ser apto para pilotar una MotoGP que, además, no es una moto cualquiera.
Se hablaron de muchas fechas, incluso de los meses de mayo y junio, ya que una lesión de este tipo, con tres operaciones y que se vio agravada por una infección, podía tenerle fuera de los circuitos hasta seis meses. Sin embargo, un heroico Marc está a punto de reducir esos plazos incluso por debajo de los cuatro. No obstante, el de Cervera tampoco quiere correr riesgos innecesarios después de un año tan difícil.
Marc acaba de regresar de Catar y en unas declaraciones recogidas por Cuatro, ha dejado claro que no descarta estar preparado para el arranque del mundial: "No descarto estar en la primera carrera, pero tampoco aseguro nada porque en una recuperación siempre hay altibajos".
La polémica vacuna
Márquez ha estado en Doha los últimos días donde ha recibido la primera dosis de la vacuna de Pfizer que el gobierno de Catar ha puesto a disposición de todos los integrantes del mundial de motociclismo. Los pilotos han recibido muchas críticas, pero Marc se defiende así: "Toda la familia de MotoGP tuvo la oportunidad de poderse vacunar y creo que fue un gran trabajo de todo el campeonato, lógicamente era voluntaria y yo escogí que sí por eso viajé. De esta manera, cuando toque vacunar aquí en España, mi vacuna irá para otra persona".
El piloto español ha llegado este lunes al aeropuerto de El Prat en Barcelona tras aterrizar procedente de Catar, donde ha permanecido en el hotel Ritz Carlton. Allí ha estado junto a su padre Julià y su asistente José Luis Martínez, aprovechando las amplias instalaciones para entrenarse y seguir con su recuperación, además de haber sido vacunado en el propio hotel. Después, tras pasar satisfactoriamente su último test PCR, ha regresado a España.
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