No fue el inicio más deseado por Fernando Alonso en su regreso a la Fórmula 1. El piloto asturiano tuvo que abandonar la carrera en la vuelta número 34 por culpa de unos problemas en los frenos traseros. El público español, que estaba pendiente de su vuelta al ruedo, se llevó un jarro de agua fría. Aún así, las sensaciones en Bahrein fueron muy positivas tras dejar varias batallas contra algunos pilotos y hacer una gran vuelta de calificación.
Fue el primer cero de la temporada y la verdad es que no se esperaba. Alpine y Renault habían asegurado que la fiabilidad era uno de los puntos fuertes del equipo durante la pretemporada. Sin embargo, cuando su rendimiento parecía bajar tras haber estado en la lucha por los puntos, el bólido azul cogía el carril de boxes del que ya no volvería a salir. Fue un mazazo para los intereses de los nacionales que se habían congregado sobre el televisor.
Había realizado las dos paradas previstas y solo tenía que cuidar bien sus neumáticos duros, el último juego que le llevaría hasta el final de la carrera, para buscar las posiciones de privilegio. Ya había perdido algunas batallas por culpa de que la velocidad punta estaba siendo una tara en comparación con las de los coches que llevaban motor Mercedes y Honda. Pero volvería a pasar por los boxes para no volver a salir.
Mientras estaba dirigiéndose a su box, Fernando confirmaba por radio que se trataba de un importante problema en los frenos traseros que hacía imposible seguir en carrera. Antes que poner en riesgo su integridad y la del resto de pilotos, así como la entereza de su coche, la mejor opción era no continuar rodando por el trazado del circuito de Sakhir. No había opción de seguir y era momento ya de pensar en la segunda cita del mundial y ver qué le había pasado exactamente al A521.
El motivo
En un principio, ya detectaron que la suciedad de la pista había afectado al conducto de los frenos traseros, la parte del coche con la que estos se refrigeran. Marcin Budkowski detalló el problema. "Después de la segunda parada, un envoltorio de un sándwich quedó atascado en los conductos de freno traseros, provocando altas temperaturas y dañando el sistema de frenado, decidiendo retirarnos por motivos de seguridad", explicó el director de la división deportiva de Renault y, por ende, de Alpine que actuó como portavoz en esta carrera.
En cuanto a los problemas de rendimiento que se estaban evidenciando con la pérdida de puestos del asturiano, Budkowski explicó que fue tras la primera parada cuando surgió "un problema que nos obligó a reducir el rendimiento del coche", seguramente relacionado con el sistema eléctrico del coche. Los pilotos tuvieron muchos inconvenientes con esta parte de sus bólidos durante todo el fin de semana, evidenciando que no han podido trabajar tanto durante este invierno ante la falta de test.
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