Lewis Hamilton en el Gran Premio de Bahréin 2022

Lewis Hamilton en el Gran Premio de Bahréin 2022 Europa Press

Motor FÓRMULA 1

Mercedes ve la luz al final del túnel: hasta Imola no se verá la gran explosión de rendimiento del W13

La escudería germana afronta una larga travesía por el desierto para las próximas carreras con el objetivo de minimizar daños lo máximo posible. 

22 marzo, 2022 17:23

Noticias relacionadas

Mercedes busca solución a sus muchos problemas. Los alemanes no han sabido dar con la tecla este invierno y ven amenazado su futuro de manera seria. Después de haber dominado la parrilla en los últimos ocho años, a pesar de que el curso pasado Hamilton cedió en su lucha contra Verstappen, este año han partido muy atrás. 

En estos momentos, los alemanes parten muy por detrás de Ferrari y también de Red Bull, a pesar de su doble abandono en Bahréin. De hecho, gracias a la caída de los de Milton Keynes, Hamilton pudo arañar un podio que será muy valioso de cara a la lucha final. Sin embargo, saben que sus problemas necesitan una solución inmediata aunque estas tardarán en llegar unas cuantas semanas. 

"Tenía problemas fundamentales que tardarán un tiempo en resolverse". Esto afirmaba Lewis Hamilton nada más concluir su participación en el Gran Premio de Bahréin. El británico sigue sin encontrarse cómodo con un monoplaza en el que el protagonismo lo tienen ahora las necesidades de limar los fallos y no el hecho de encontrar nuevos avances o mejoras para futuras carreras. 

Lewis Hamilton durante los test de pretemporada 2022 de Fórmula 1

Lewis Hamilton durante los test de pretemporada 2022 de Fórmula 1 Europa Press

Mercedes tiene en mente su propio plan. Este pasa por conseguir el mayor número de puntos posibles ahora que no pueden ofrecer una gran versión y esperar hasta que estén para luchar por victorias. Ese será el momento en el que puedan soñar con la remontada. Y eso podría llegar a partir de Imola, cuando tienen fijado el punto de arranque para llegada de su paquete de mejoras más importantes. Hasta entonces, les tocará sufrir y remar tanto en Arabia Saudí como en Australia

"Nuestra prioridad es resolver los problemas actuales de falta de prestaciones. No disponemos de un coche que nos permita batirnos por la victoria". Esto afirma también Andrew Shovlin, director de ingeniería de la escudería germana, quien ha sido el más sincero su análisis sobre la situación que atraviesan. 

"En términos de ritmo, ahora no podemos inquietar a Ferrari o Red Bull, así que lo apostamos todo a la estrategia de ir a tres paradas. No podemos tolerar por mucho tiempo esta situación si queremos ganar el Campeonato". Mercedes asegura que uno de sus mayores problemas se encuentra en el control del porpoising, un fenómeno que se ha agravado todavía más desde su llegada a Bahréin, especialmente con la entrada del nuevo modelo del W13 y sus pontones totalmente recortados.

"El equilibrio es muy delicado. Nos falta adherencia porque para evitar el rebote, debemos aumentar la altura mínima al suelo y eso hace que perdamos carga". Sholvin augura largas horas de trabajo por delante: "Las diferencias son importantes, pero tenemos una idea de cómo mejorarlas, podemos aportar prestaciones relativamente rápido. Tenemos algunas ideas que explorar para mejorar nuestro ritmo".

Problemas con el motor

Desde Mercedes transmiten que pueden haber cometido un error importante a la hora de tratar los datos que obtuvieron, primero en Barcelona, y después en Bahréin, con el segundo modelo de la evolución del monoplaza: "Quizás por eso no prestamos toda la atención debida a los datos de Barcelona. Y cuando nos dimos cuenta de su gravedad, ya era tarde. No esperábamos tener tales problemas".

Lewis Hamilton pasa bajo la noria del circuito de Sakhir.

Lewis Hamilton pasa bajo la noria del circuito de Sakhir. REUTERS

La escudería germana ha concluido este análisis con la reflexión que ha realizado su líder supremo, Toto Wolff: "Más que traer cosas nuevas, lo importante es saber cómo funcionan". Además del problema de los nuevos pontones recortados y del porpoising, Mercedes registra una falta de velocidad punta muy considerable. Por eso Wolff indica que tendrán que hacer todo lo que puedan por mejorar: "Sabemos cómo mejorar la resistencia al aire. Si hay que cortar el ala en pedazos, cortaremos el ala". 

No obstante, uno de los grandes problemas que tiene ahora mismo la escudería con sedes en BrackleyBrixworth es la de su unidad de potencia. La pérdida de rendimiento no solo la ha pagado el equipo que lideran Hamilton y Russell, si no que todos los motores Mercedes de la parrilla, McLaren y Aston Martin, están ahora mismo a la cola de la parrilla. 

[Más información: Nueva guerra en la F1 por Haas, Alfa Romeo, Ferrari: las relaciones entre los equipos B y las fábricas]