Ferrari se ha convertido en un auténtico polvorín. El hecho de haber creado el mejor coche de la parrilla a principios de temporada provocó que las expectativas se dispararan. El título no solo era un objetivo, era casi una obligación. Especialmente al contar con una pareja de pilotos tan competente como la que forman Carlos Sainz y Charles Leclerc.
Sin embargo, la temporada del equipo italiano ha sido casi desastrosa. Han pasado de intentar pelear por la victoria con Max Verstappen a que este se escapara en la clasificación. Ahora, está en juego la segunda posición del campeonato entre el piloto monegasco y 'Checo' Pérez. Además, Carlos no tiene opciones de podio y ha pasado a estar a la zaga de George Russell y Lewis Hamilton.
Red Bull se ha confirmado como inalcanzable y hasta Mercedes les ha recuperado el terreno perdido. Problemas de fiabilidad, fallos en los pit stops y estrategias desastrosas han terminado siendo la tónica habitual de una temporada que se podría resumir en una sola palabra que no suele tener cabida en Maranello: fracaso.
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Por ello, John Elkann estaría pensando en reemplazar a Mattia Binotto en su puesto de jefe de equipo. El sustituto, tal y como informó La Gazzetta dello Sport, sería Fréderic Vasseur, actual líder de Alfa Romeo, una escudería que podría considerarse casi filial de los del Cavallino Rampante y que ha tenido un notable crecimiento en los últimos años. Ha conseguido superar a Williams, Haas, Alpha Tauri y ahora pelea con una principal como Aston Martin.
La guerra Binotto-Leclerc
Ferrari salió al paso de estas informaciones con un comunicado oficial en el que ratificaba a su Team Principal. Sin embargo, no son estos los únicos problemas que habría en la escudería. Tal y como apunta ahora el diario L'Équipe, Mattia Binotto y Charles Leclerc habrían roto su relación completament en los últimos meses. Tanto es así que llevarían sin hablar entre ellos desde el Gran Premio de Silverstone.
De ser cierto, evidenciaría muchos de los problemas que se viven en Ferrari y es que si el jefe y la estrella no se dirigen la palabra, es casi imposible prosperar de ninguna forma. El último choque se ha vivido en el Gran Premio de Brasil. Leclerc hizo el ridículo al salir con neumáticos intermedios al primer intento de la Q3 de la clasificación del pasado viernes cuando todos sus rivales lo habían hecho con blandos porque todavía no llovía. La posición de salida del monegasco quedó arruinada.
Ya en la carrera, Charles deslizó por la radio que Sainz debía dejarle pasar para terminar tercero la prueba y así sumar más puntos que 'Checo' Pérez en su lucha por el subcampeonato. Ferrari, con toda lógica, hizo caso omiso a esta desesperada e injustificada petición del piloto monegasco.
Los rumores de que Binotto tiene los días contados recorren el paddock de arriba a abajo. Y ahora coge fuerza la idea de que el principal impulsor de esta cuestión sería el propio Leclerc. El monegasco no ha perdonado los fallos de estrategia que se vivieron en el Gran Premio de Gran Bretaña, cuando no paró en el debido momento, y eso le costó la carrera. Binotto reprendió a Leclerc delante de las cámaras y eso terminó de provocar el estallido de la relación.
Ahora, su agente, Charles Nicolas Todt, es el principal sospechoso de haber filtrado este tipo de informaciones que confirman la tensión total en el box de los italianos y que señalan directamente al líder de la escudería. Además, Fréderic Vasseur y Leclerc ya coincidieron durante la explosión del piloto en la factoría de Alfa Romeo, antes conocida como Sauber. Ferrari no quiere repetir otro año como el 2022 ahora que se han convertido en un rival para Red Bull y Mercedes después de años de ostracismo. Y la idea de que con Binotto será imposible dar el salto de calidad que necesitan empieza a calar hondo.