Los pilotos del Rally Dakar han vivido una noche complicada por un cambio en el guion de la competición. La lluvia llegó al campamento Ad Dawadimi y esto dejó imágenes inesperadas. La organización decidió cambiar el orden de las etapas 7 y 8, las cuales, además, fueron recortadas, y se improvisó así una especie de semimaratón entre ambas.
Esto dejó, por otro lado, a los pilotos sin poder contar con sus habituales rulottes. De ahí a verles en tiendas de campaña, durmiendo en colchones sobre el suelo e incluso a la intemperie. Lluvia, frío y algunos que tuvieron la suerte de poder descansar en las carpas que suelen ser para los periodistas.
Incluso el comedor fue, por un día, lugar donde albergarse en esas mencionadas tiendas de campaña o con sacos de dormir. Un cambio sobre la marcha que algunos han llevado peor que otros. En especial, los que lo han sufrido más son aquellos que no lo pasaron bien en las últimas etapas recorridas.
Una de las imágenes más comentadas es la protagonizada por Sebastian Loeb, quien tuvo auténticos problemas para desplegar su tienda de campaña. Una tienda de campaña de las conocidas como '2 seconds'.
En el vídeo publicado por la cuenta oficial del Rally Dakar en sus redes sociales, se puede ver a Sebastian Loeb recibiendo ayuda para montar su tienda de campaña. Y, también, que fue uno de los pilotos que tuvo que dormir a la intemperie. Aunque desde Instagram, el community manager bromeó con Decathlon para que le hagan un tutorial sobre cómo desplegar su famosa '2 seconds'.
El propio Loeb acabó bromeando en Twitter sobre lo sucedido. "Vivir mi vida en el Dakar. Noche en tienda de campaña para la etapa maratón. Un pensamiento para todos los voluntarios o competidores que experimentan esto cada tarde después de los días muy largos. Respeto señores", escribió en su perfil junto a una fotografía ya dentro de su tienda montada.
Esto podría haber sido un hecho puntual en la presente edición de 2023 del Rally Dakar, sin embargo, se espera que algo así vuelva a ocurrir entre las etapas 11 y 12 de la carrera. ¿Por qué? Porque está previsto que vuelva a producirse un nuevo maratón.
De hecho, se espera que el próximo sea todavía peor. Ya que se habla de que la exigencia será entonces mayor, puesto que los pilotos no dispondrán de la asistencia que sí tuvieron en el campamento de Ad Dawadimi.