Problemas para Ferrari y para Charles Leclerc de cara a Jeddah. El inicio de temporada de la escudería italiana y del piloto monegasco está siendo para olvidar. Sin duda, la hoja de ruta para pelear por el Mundial no está siendo la esperada. En Bahréin, el teórico líder del equipo de Maranello tenía en su mano el podio o, al menos, pelear con esa tercera plaza con Fernando Alonso.
Sin embargo, su abandono puso en bandeja al español su presencia número 99 en el cajón. Ahora, en Arabia Saudí, Leclerc vuelve a tener un hándicap importante. Los problemas que le hicieron abandonar en Bahréin registrados en una centralita de su SF-23 han vuelto a hacer acto de presencia.
El monegasco eligió una en Bahréin y la tuvo que cambiar porque desde el garaje habían registrado problemas en la misma. Los pilotos de Fórmula 1 solo tienen dos para todo el curso, ya que a la tercera acarreaba sanción. Sin embargo, en carrera se dañó la segunda, dejando al piloto de Ferrari sin red. La esperanza era poder salvar aquella primera que había sufrido problemas. Sin embargo, no estará disponible para Arabia Saudí.
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Así pues Leclerc tendrá que penalizar en el circuito de Jeddah al tener que usar esa citada tercera centralita en su SF-23. Una noticia terrible para el gran aspirante al quitarle la corona de campeón a Max Verstappen, ya que sufrir su primera penalización por un problema en el monoplaza en la segunda carrera es un cuanto menos desmoralizante. Esta circunstancia, que hasta ahora era un secreto a voces, ha sido confirmada por el Team Principal de Ferrari, Fred Vasseur.
El sustituto de Mattia Binotto este invierno ha confirmado que Leclerc cambiará su control unit: "Tuvimos dos problemas. El domingo por la mañana, al arrancarlo; y por la tarde en la carrera. En ambos casos fue la centralita, no nos había sucedido antes". Además de las dos centralitas, el SF-23 de Leclerc también tenía dañada una de las baterías. Así pues, Leclerc tendrá imposible conseguir la pole position que firmó el año pasado en Jeddah y tendrá que pelear por salir en la undécima posición, la mejor a la que puede optar.
Esta sanción, además de poner más complicada su llegada hasta el podio, añade un problema extra a Ferrari que tenía especiales expectativas puestas en el circuito de Arabia Saudí. Las variantes realizadas este invierno habían dotado de mayor poder al monoplaza italiano en circuitos con largas rectas y es que han optimizado su velocidad punta y sus salidas. Sin embargo, a las primeras de cambio, problemas e imposibilidad de sacar conclusiones.
Evitar otro abandono
Ferrari esperaba haber podido salvar alguna de las centralitas usadas en Bahréin antes de su llegada a Jeddah. Sin embargo, la desconfianza con los plazos les ha obligado a apostar por una tercera para no sufrir un nuevo abandono en Arabia Saudí fruto de la precipitación. El objetivo es evitar un segundo cero.
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En Maranello se encuentran estudiando con detalle estas centralitas, ya que son elementos que casi nunca se rompen. Los rumores apuntan a que es por las excesivas vibraciones que registra el SF-23, aunque el año pasado no tuvieron este problema a pesar de la aparición del porpoising. Por lo tanto, tendrán que investigar a fondo qué sucede.
Esta penalización para Leclerc elimina a uno de los favoritos a ocupar una de las primeras posiciones en clasificación y, por tanto, aumenta las posibilidades de salir delante de corredores como Fernando Alonso, Hamilton, Russell o su compañero Carlos Sainz. Además, elimina competencia para Verstappen y para 'Checo' Pérez en la lucha por la pole position y por la victoria final.