Jake Dennis, el nuevo campeón de la Fórmula E: profeta en su tierra con un título heroico y caótico

A la heroica y ante su público, así fue como Jake Dennis (Nuneaton, Warwickshire, Gran Bretaña; 1995) conseguía alzarse con la novena edición del Mundial de Fórmula E. Una auténtica exhibición del piloto sobre el trazado del E-Prix de Londres para llevarse el gato al agua y sumar el primer título de su cuenta particular y la del equipo Andretti. Una lucha contra la locura que sumió a la carrera. Una puesta en acción magnífica que le convirtió en el campeón.

Jake Dennis llegaba como gran favorito a Londres para alzarse con la victoria en el campeonato. Sin embargo, una amplia batalla se avistaba en el horizonte con hasta cuatro pilotos en la pomada, ya que Nick Cassidy (Emvision), Mitch Evans (Jaguar) y Pascal Wehrlein (Porsche) todavía tenían mucho que decir sobre el trazado británico antes de que se decidiese todo.

Con dos carreras por delante, la pelea se antojaba implacable. Ninguno de los pretendientes se había alzado con la corona, por lo que Londres iba a proclamar a un nuevo rey de la Fórmula E. Aunque Jake Dennis tenía todo a favor para hacer buenos los pronósticos y llevar a Andretti a la gloria.

Sin embargo, la amenaza de Nick Cassidy era el mayor peligro para Dennis, que desde el primer momento se vio apoyado por su público. La afición, siempre tan presente en este tipo de pruebas, se mostró como un elemento desequilibrante. Cada vez que su piloto pasaba por meta rugían en marea, insuflándole un gran apoyo, que a la postre fue crucial para alzarse con la victoria.

Aún así, no lo tuvo nada fácil para consagrarse como el mejor piloto de la temporada. La buena clasificación de Cassidy y Evans hacía presagiar una gran batalla sobre la pista y no defraudó para nada en el trazado británico. Una pelea constante entre los mejores hacía que vuelta a vuelta la tensión fuese creciendo sobre el asfalto.

La ambición de Cassidy hizo que un toque con su compañero de equipo, Sebastien Buemi, acabase con sus esperanzas a mitad de la carrera. Un duro golpe a las aspiraciones del piloto de Envision Virgin, que abandonó y le abría las puertas de par en par a Dennis para convertirse en profeta en su tierra.

Un apoteósico y caótico final de carrera, con varias banderas rojas en las últimas vueltas, hizo que la tensión aumentase y que Andretti viese con intriga desde su box como Dennis tenía que auparse hasta la tercera plaza para proclamarse campeón. Y lo hizo dando una auténtica lección para alcanzar la segunda posición, con una notable templanza y sin fallo alguno apelando a la heroica en las últimas vueltas para escalar posiciones. Evans se hacía con la victoria insuficiente mientras el británico alzaba los brazos para coronarse como el mejor en esta edición de la Fórmula E.

Una demostración de Dennis para refrendar su dominio esta temporada en el campeonato eléctrico. Dos victorias y 10 podios en 15 pruebas le han coronado como el mejor y no le ha hecho falta utilizar su última bala, la carrera de este domingo, para conseguir su primera corona en la Fórmula E.

Los accidentes marcaron la carrera

A pesar de las miradas estaban puestas en los Dennis, Cassidy o Evans, los accidentes acapararon gran parte del protagonismo de las 38 vueltas disputadas, dos más de añadido debido a las montoneras formadas. Un final de carrera complicado que estuvo marcado por los incidentes sobre el asfalto.

El primero de ellos tuvo lugar en franco-argentino Sacha Fenestraz. El piloto de Nissan arrolló a otro monoplaza, llegándose a subir encima del coche rival, para acabar estrellado en los muros, haciendo imposible que no se pudiese sacar el vehículo sin la ayuda de las grúas. Justo en la zona donde se activaba el modo ataque. Un accidente que hizo que el Safety Car se volviese el protagonista durante varias vueltas, lo que añadía más tensión a la últimos pasos por la recta de meta.

El último tuvo como señalado a Sebastien Buemi. El de Envision Virgin cerró en exceso en una curva a Rast y provocó una montonera increíble que afectó al 90% de la parrilla, provocando una salida del coche del seguridad a apenas cuatro vueltas para la finalización del E-Prix. Una acción que le volvía a señalar tras dejar a su compañero sin opciones al título por un toque. Dos acciones comprometidas que no le evitaron acabar en la tercera plaza tras la sanción a Da Costa y así hacer menos amarga la prueba para su equipo.

Profeta en su tierra

Jake Dennis se proclamó campeón en Londres y se convirtió en el primer piloto británico en alzarse con la victoria. Hasta el momento solo había habido siete campeones en la Fórmula E en sus ocho ediciones previas, ya que Jean-Éric Vergne había sido el único en repetir victoria con su particular doblete.

Sin embargo, la hazaña del piloto de Andretti tiene más valor ya que lo ha conseguido ante su público y en la última prueba de la temporada. Además, se convierte en el primer británico en estrenarse en esta modalidad. Un punto de inflexión para un territorio que siempre ha ido a la vanguardia en los temas automovilísticos y que siempre ha sido cuna de grandes pilotos.

De esta manera, Dennis se une a los Nelson Piquet Jr,  Sébastien Buemi, Lucas di Grassi, António Félix da Costa, Nyck de Vries y Stoffel Vandoorne en olimpo de los campeones de la Fórmula E. Un reinado que tendrá la oportunidad de disfrutar este domingo en la segunda carrera que pondrá fin al campeonato.