Lewis Hamilton lo ha vuelto hacer. Segundo Mundial consecutivo para el británico, empatando así en cinco campeonatos a Juan Manuel Fangio y superando los cuatro que tenían también Sebastian Vettel y Alain Prost. El siguiente objetivo será Michael Schumacher. El alemán tiene siete y viendo la situación por la que atraviesa el inglés y el Mercedes, no es descabellado pensar que podría llegar a esa cifra.
Hamilton salía desde el tercer cajón tras la pole conseguida por Ricciardo y el segundo puesto de Verstappen. Nunca peligró el quedar entre los siete primeros para ganar un nuevo Mundial en México. Los Red Bull fueron los mejores durante todo el fin de semana y así se demostró con Verstappen que consiguió el primer puesto. La escudería austriaca estuvo a punto de conseguir el doblete, pero un abandono de Ricciardo en las últimas vueltas lo imposibilitó.
Fue una carrera muy cómoda, aunque con algún problema, para Hamilton. Al británico le valía quedar entre los siete primeros para conquistar el campeonato y apenas arriesgó. No pudo luchar por entrar en el podio debido a que sus rivales fueron mejor. Empezó bien avanzando posiciones, pero con el paso de las vueltas, los neumáticos le jugaron una mala pasada debido a los graves problemas de graining, cosa de la que se quejó debido a los neumáticos equivocados que le habían colocado su equipo.
Hamilton es el único piloto que se ha proclamado campeón del mundo tres veces en una carrera en la que no hizo podio. Y lo hizo en la decimonovena y antepenúltima prueba de la temporada a falta de dos grandes premios, el de Brasil y el de Abu Dhabi.
Verstappen se impuso en México
Verstappen ganó por segunda vez consecutiva en México. Superó a Ricciardo nada más empezar la carrera y nadie consiguió arrebtarle una victoria, que fue la quinta de su carrera y la segunda de la temporada. Vettel se hizo con la segunda plaza a falta de diez vueltas al adelantar a Ricciardo, que acto seguido tuvo que abandonar por avería en su coche.
Carlos Sainz y Fernando Alonso tuvieron que abandonar por problemas mecánicos. El primero protagonizó una brillante salida en la que paso del octavo al sexto lugar. El madrileño luego se quedó instalado en la octava plaza, en la que se mantuvo hasta que la mecánica de su Renault dijo basta. Tuvo que detener su monoplaza después de que sentir un latigazo en el tren trasero.
Tampoco pudo acabar Fernando Alonso y abandonó nada más comenzar la carrera. Una pieza del chasis del Force-India del francés Esteban Ocon desprendida en la arrancada tras un choque quedó alojada en la parte delantera del bólido de Alonso. Desde el muro el equipo le pidió que detuviera el coche. Fue su octavo abandono de la temporada y segundo consecutivo.