Red Bull quiere vivir otra época dorada como la que protagonizó con Sebastian Vettel al volante entre 2010 y 2013. El título conquistado por Max Verstappen en 2021 es solo la prueba de que la escudería ha ido por el camino correcto desde que apostó por el piloto neerlandés y desde que unió su camino con Honda. En 2022, un año en el que se reseta la parrilla, la ambición es máxima en el equipo que dirige Christian Horner.
En lo que respecta a Max, no hay que quitarle mérito alguno por lo conseguido este año. Era muy difícil ganarle el título a Hamilton, Sir Lewis tras ser nombrado Caballero de la Reina Isabel, que venía de ganar seis seguidos para igualar la leyenda de Michael Schumacher. Y lo hizo en el Mundial más emocionante y polémico de los últimos años que se resolvió en una carrera final en Abu Dabi ya para la historia.
Verstappen tiene 24 años y ya es campeón del mundo. Vettel, el más joven en serlo, lo fue solo con un año menos. El neerlandés tiene lo más valioso de todo, que es tiempo y es sobre eso sobre lo que viene construyendo Red Bull su proyecto. De cara al futuro, los plazos están marcados y, por muchas amenazas que haya de dejar la Fórmula 1, la escudería austriaca tiene un plan muy bien definido.
Red Bull Powertrains
La clave para entender todo es que, pese a que Honda anunció su salida de la Fórmula 1 para 2021, seguirá de la mano de Red Bull en 2022. La relación es muy estrecha y el fabricante japonés se encargará de llevar a la escudería austriaca al siguiente nivel. Nace Red Bull Powertrains, división de la marca que acabará teniendo control total del suministro de unidades de potencia para la escudería. Por ahora, puesto que solo abarca la F1, trabajará con Honda en la transición.
Para empezar, algunos empleados de Honda Racing Development UK se han trasladado a Red Bull Powertrains. Esta cuenta con derecho de utilizar la propiedad intelectual de Honda relacionada con la unidad de potencia y la firma japonesa se encargará del ensamblaje de las unidades de potencia, la provisión de apoyo de ingeniería en pista y la asistencia en las operaciones de carrera.
En 2023, cuando cambien algunas reglas en el Mundial de Fórmula 1, toda la responsabilidad de la fabricación y el servicio de motores de Red Bull Racing y AlphaTauri recaerá sobre Red Bull Powertrains. Es decir, el gran salto de Red Bull en la industria de la F1 será pasar a formar parte de los motoristas (véase Ferrari, Mercedes o Renault) del Gran Circo.
La conexión Red Bull - Honda, que se extenderá a otras disciplinas, también abarcará el desarrollo de jóvenes pilotos, para dar con pilotos japoneses que vayan siguiendo los pasos de Yuki Tsunoda en la Fórmula 1.
En 2021 se consiguió derrocar al rey, en 2022 el objetivo es defender el trono y desde 2023 se quiere ampliar la dinastía Red Bull en la Fórmula 1. El equipo de Horner está en su mejor momento de los últimos años y quiere gobernar en la nueva era del Gran Circo.