Caos. Así se puede definir el final de carrera en el Gran Premio de Australia de la Fórmula 1 2023. El GP fue de lo más accidentado desde el inicio, con el adiós de Charles Leclerc a las primeras de cambio y una bandera roja posterior por el accidente de Alex Albon. Aunque ahí no acabó todo, nueva parada a falta de dos vueltas y un relanzamiento que dejó a Carlos Sainz Jr. tocándose con Fernando Alonso y a los Alpine fuera después de chocar entre sí.
El lío llegó con la segunda bandera roja de la carrera. Se paró todo en el Circuito de Albert Park después de que el Haas de Kevin Magnussen perdiese una rueda. Esto le dejó fuera y al resto de pilotos todavía en competición marchándose hacia el pit lane. Cuando llegó la reanudación, también lo hizo la polémica.
Salieron los pilotos en ese relanzamiento agresivos para mejorar sus respectivas posiciones. Max Verstappen lo hizo desde su puesto privilegiado, defendiéndose, como Lewis Hamilton. Pero justo por detrás de ellos se produjo el primer choque. Lo peor, que fue entre los dos españoles de la parrilla.
Carlos Sainz tocó el coche de Fernando Alonso, provocando que el asturiano de Aston Martin cayese de la tercera a la undécima posición. Pero no solo eso, lo peor se lo llevaron los Alpine. Tremendo accidente por un choque entre ambos que dejó a Esteban Ocon y Pierre Gasly fuera de carrera.
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Esto dejó de nuevo la carrera parada. Tercera bandera roja y toda la atención entonces en lo que decidiesen los comisarios. Dos opciones destacaron entonces: que se relanzase de manera simulada para que los pilotos acabasen, pero con las posiciones de antes del anterior relanzamiento o que se reanudase con los puestos después de ese parón. Es decir, en el primer caso con Fernando Alonso tercero y en el segundo, con Carlos Sainz en esa posición privilegiada.
Decisión y castigo
Los organizadores decidieron que se relanzase con una vuelta testimonial y que los puestos fuesen los anteriores a esa última bandera roja. Pero con una salvedad, aquellos que no pudiesen salir a la pista, caso de los destrozados Alpine, se quedaban fuera de la carrera y de los puntos.
Primeros perjudicados, a la espera de que se conozca la sanción, ya que se abrió investigación, pero no la resolución. Y también castigo para un Carlos Sainz que no se podía creer, todavía subido en su Ferrari, los 5 segundos que le dejaban fuera de los puntos en Australia.
En la mítica escudería italiana el enfado es mayúsculo. "Creo que es dura. Era la resalida, hemos tenido un contacto similar entre Stroll y Leclerc y no ha habido acción", dijo Frédéric Vasseur al micrófono de DAZN. Mientras que Carlos Sainz prefirió no hablar en caliente y aseguró que iba a hablar con los comisarios.