El Gran Premio de Mónaco ya ha dado a su fin y Aston Martin ha recogido los frutos de su gran trabajo a lo largo del Mundial de Fórmula 1. El segundo puesto de Fernando Alonso en el Principado refrendó el fantástico de su escudería y soñar con esa victoria que se acabó llevando finalmente Max Verstappen.
Tras mostrar su mejor versión, Aston Martin no quiere dejar pasar la oportunidad de seguir instalado en la élite de la Fórmula 1. De este modo, tienen mucho que trabajar para seguir en la cresta de la ola y se han puesto manos a la obra para ello, puesto que tiempo corre muy deprisa en el Gran Circo.
Tras confirmarse su alianza con Honda para que la marca nipona le suministre motores a partir de 2026, Aston Martin tendrá que tomar las riendas en cuanto a fabricar las demás piezas para su monoplaza. Y, tal y cómo ha reconocido Mike Krack, falta muy poco para que arranquen con ello.
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Con la mudanza a la nueva fábrica, la escudería tendrá la misión de darle forma, entre otras cosas, a la caja de cambios. Esto le obligará a dar un paso adelante en cuanto a la fabricación de piezas para mantenerse en lo más alto, algo que ha reconocido el jefe de Aston Martin tras el Gran Premio de Mónaco.
"A partir de 2026, nuestro objetivo es fabricar la caja de cambios 'en casa', además de la suspensión trasera", han sido las palabras de Mike Krack en unas declaraciones recogidas por la agencia de noticias GMM. Tras abandonar su unión con Mercedes, que era la principal suministradora de estas dos piezas y sus motores, Aston Martin tendrá en su poder el diseño de las mismas en el futuro.
"Comenzaremos a mudarnos a la nueva fábrica este fin de semana. Después de eso, empezaremos a desarrollar nuestra propia caja de cambios. Todavía nos quedan dos años y medio", añadió Krack sobre los planes más inmediatos que tienen alg llegar a su nuevo centro de operaciones.
El precio de la fabricación
Otro de los elementos que ha querido resaltar el jefe de Aston Martin ha sido el alto precio de los costes de fabricación de estas piezas. Por ello, ha asegurado que ya se encuentra dialogando con la FIA para que se reduzca de manera considerable y evitar que vayan tan ahogados en lo que a presupuesto se refiere.
"Es un desafío desarrollar y fabricar una nueva, pero no es imposible. El problema es el coste. Son 8-9 millones de dólares al año para muy poca diferencia de rendimiento, y ahora tenemos el límite presupuestario. Creo que es hora de reconsiderar esto", resaltó Krack sobre la elevada inversión que tendrán que realizar.
"Estamos hablando con la FIA sobre cómo desarrollar una caja de cambios con una tecnología más simple y una mejor relación coste-beneficio para hacer que todo el deporte sea más sostenible", sentenció en sus declaraciones Krack, reconociendo que ya están tratando de encontrar la manera de rebajar los costes de manera considerable.