El Mundial de Fórmula 1 se ha convertido en un auténtico monólogo de Max Verstappen. El piloto de Red Bull se aupó hasta lo más alto del podio en el Gran Premio de Gran Bretaña y refrendó su dominio nuevamente. Con su victoria en Silverstone, el neerlandés suma su octava del 2023 y apuntala su liderato. [Así te hemos contado la carrera]
Por detrás, la dupla británica formada por Lando Norris y Lewis Hamilton le escudaron en el podio en la segunda y tercera posición. Un premio para la afición que acudió hasta el trazado, que se encontró con un magnífico rendimiento de los pilotos patrios. Ellos fueron grandes protagonistas de la carrera.
No fue el mejor domingo para Fernando Alonso y Carlos Sainz. El bicampeón del mundo apenas pudo terminar en la séptima plaza tras vivir un ajetreado Gran Premio. Por su parte, el de Ferrari tan solo acabó en la décima posición tras desplomarse en las últimas vueltas y ser pasado por su compañero de equipo.
El neerlandés fue más humano que nunca, pero ni siquiera con esas los demás pilotos pudieron discutir una victoria más en su haber. De este manera, Max Verstappen consigue su sexto triunfo consecutivo del Mundial y mete aún más distancia respecto a sus perseguidores.
La gran sorpresa en Silverstone fue, sin lugar a dudas, el enorme papel de McLaren. Con Lando Norris acabando en la segunda plaza y con Oscar Piastri acabando en la cuarta posición, consiguieron superar a otras escuderías a priori superiores como Ferrari o Aston Martin, que terminaron con más dudas que certezas en el aslfato británico.
El Verstappen más mortal
No fue el mejor arranque carrera para Max Verstappen. Su Red Bull sufrió en los primeros compases de la prueba ante el fulgurante inicio de los McLaren. Lando Norris le superó en la salida y Piastri se quedó a nada replicar a su compañero de equipo. Esto hizo que el neerlandés se tuviese que exprimir para recuperar el liderato.
Tras recuperarlo, Verstappen sufrió de nuevo, pero esta vez para marcharse de sus rivales. Su monoplaza no se mostró tan superior como otras ocasiones y eso se notó sobre el asfalto. Aún así, poco a poco fue incrementando la distancia respecto a Norris y compañía.
Por detrás, Charles Leclerc, George Russell, Lewis Hamilton y Carlos Sainz se intercambiaban posiciones para intentar alcanzar un podio que tenían los dos McLaren. Fernando Alonso, siempre batallador, intentaba, con éxito, mantener a raya a sus rivales a lo largo de la prueba.
El punto de inflexión llegó con el Safety Car tras el incendio del coche de Magnusssen. Esto favoreció a los intereses de los que todavía no había parado, entre los que se encontraban Fernando Alonso, Lewis Hamilton, Lando Norris o Max Verstappen. Les ayudó a mantener sus posiciones y a los británicos a auparse al podio.
El Red Bull de Verstappen no frenó en su intención de marcharse a por la victoria y Silverstone vibraba al ver a dos pilotos alcanzar el podio en su casa. Por sexta vez consecutiva en el Mundial, el líder del campeonato sumó otra victoria más mientras era escoltado por Norris y Hamilton. Por detrás, Alonso y Sainz se tuvieron que conformar con la séptima y la décima plaza respectivamente.