Fernando Alonso está de estreno con su flamante nuevo Aston Martin Valkyrie, un vehículo que no solo destaca por su espectacular diseño, sino por las avanzadas tecnologías inspiradas en la Fórmula 1 que incorpora.
El vehículo fue diseñado por Adrian Newey en la época en que Aston Martin era socio de Red Bull. De confirmarse el fichaje del británico por la escudería presidida por Lawrence Stroll, ambos volverán a encontrarse y a trabajar juntos aunque esta vez para trabajar en el equipo de Fórmula 1.
La adquisición de este coche de ensueño por parte de Fernando Alonso ha venido acompañada de una anécdota y un pequeño incidente en las calles de Mónaco que no ha pasado desapercibido.
El Aston Martin Valkyrie es un hiperdeportivo que refleja todo el conocimiento y la experiencia de la escudería. Este vehículo fue concebido para ser un coche de F1 pero adaptado para las carreteras.
De hecho, es la base sobre la que trabaja en nuevo equipo de Aston Martin para su estreno en el Mundial de Resistencia (WEC) y con el que competirán en las próximas 24 Horas de Le Mans.
Para su coche, Fernando Alonso trabajó junto con el equipo de Aston Martin para personalizar su Valkyrie, el cual está valorado en unos 2,7 millones de euros esterlinas, algo que le convierten en una joya sólo al alcance de grandes propietarios. Además, la personalización llevada a cabo para el piloto español lo convierte en una unidad única en el mundo.
El coche tiene un motor híbrido V12 de 6.5 litros y puede acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 2.5 segundos, gracias a sus impresionantes 1.155 caballos de potencia.
Además, su diseño incorpora un 85% de fibra de carbono, el mismo material utilizado en los monoplazas de Fórmula 1, y se destaca por los detalles personalizados que Alonso ha añadido, como el número 14 grabado en el pedal del acelerador y el logotipo en los asientos.
El Valkyrie es, sin duda, una auténtica bestia sobre ruedas, creada en la sede de Aston Martin Lagonda en Gaydon y ensamblada a mano por un equipo de técnicos altamente especializados. Cada unidad requiere más de 2.000 horas de trabajo para ser completada, lo que refuerza su exclusividad: solo se han fabricado 150 unidades en todo el mundo.
Fernando Alonso no es el único piloto de Fórmula 1 en poseer uno. Max Verstappen posee uno y ya se hizo viral en las redes sociales al grabarse conduciéndolo por el túnel de Canta-Galet en la autopista A-8 que une Marsella y Niza a 124 km/h (según se ve en el vídeo), cuando esta zona debería tener un límite de velocidad de 90 km/h. Es decir, conducía 34 km/h por encima de lo permitido.
El incidente en Mónaco
Pese a ser un coche excepcional, el debut del Aston Martin Valkyrie de Fernando Alonso no fue del todo ideal que podría haber imaginado el dos veces campeón del mundo de Fórmula 1.
Poco después de recibir el vehículo en las instalaciones de Aston Martin, el piloto tuvo un desafortunado incidente que obligó a que el coche terminara siendo trasladado en una grúa, lo cual llamó la atención de muchos curiosos que estaban cerca del lugar. Las imágenes del coche de 2,7 millones de euros subido en la grúa generaron sorpresa y risas, aunque afortunadamente no hubo daños relevantes que lamentar.
El hecho de que el coche estuviera siendo conducido por un técnico especializado durante la subida a la grúa demuestra el nivel de complejidad y delicadeza que implica manejar este vehículo, que cuenta con tecnología extremadamente avanzada.
La negativa de Lawrence Stroll
Durante una entrevista en Dazn, Fernando Alonso reveló una anécdota que ha condicionado su compra del Aston Martin Valkyrie. Al fichar por la escudería, el piloto español quiso aprovechar su nuevo vínculo con la marca y se acercó al presidente ejecutivo de la empresa, Lawrence Stroll, para preguntar si los pilotos del equipo tenían algún tipo de descuento en la compra de coches de la marca.
La respuesta del empresario canadiense, para sorpresa del español, fue contundente: "Ninguno, a pagar como todos". El asturiano comentó entre risas cómo esperaba algún tipo de trato especial, algo bastante habitual en otras escuderías en las que ha estado como McLaren o Ferrari.
Pese a haberle costado el precio íntegro de venta al público, Fernando Alonso se ha mostrado entusiasmado con su nueva adquisición y trató de quitarle hierro al problema mecánico que tuvo. El asturiano comentó entre emojis de risas "Ganando credibilidad", en respuesta a la noticia de la avería de nuevo Valkyrie.