Lando Norris reinó sobre la noche de Abu Dabi. El piloto neerlandés cerró a lo grande la última sesión de clasificación de la temporada y se llevó la pole sobre el trazado asiático. Una exhibición del piloto de McLaren, quien dio un golpe sobre la mesa en el momento de la verdad.
Finalizó por delante de su compañero de equipo Óscar Piastri. Lo hizo con un margen de dos décimas, las mismas que con Sainz. El español, que tenía la oportunidad de ganarle la batalla a los McLaren, se quedó a las puertas y tendrá que remontar el domingo para soñar por un posible Mundial de Constructores.
Verstappen finalizó cuarto. El neerlandés dio un golpe sobre la mesa en el primer envite, pero poco pudo hacer ante las gomas nuevas de la escudería británica. Hizo todo lo que pudo el tetracampeón del mundo de F1.
También fue una sesión brillante de Fernando Alonso. El asturiano obró de nuevo el milagro y metió a su Aston Martin en la octava posición. Mañana sufrirá, pero todo es posible con el español.
Batalla hasta el final
Con la lucha del título de Mundial de Constructores en juego, tanto los Ferrari como los McLaren salieron con el cuchillo entre los dientes en busca de marcar terreno desde la primera sesión. Leclerc cerró en primera posición y Carlos en tercera, dejando mucha presión en la escudería inglesa, todavía al acecho.
Sin duda, la gran sorpresa de la Q1 llegó con la eliminación de Hamilton. El piloto de Mercedes sufrió un percance con un bolardo en su último intento y quedó apeado a las primeras de cambio en la que fue su última sesión de clasificación con el equipo que le ha hecho ser uno de los más laureados de la historia.
El optimismo en Ferrari era máxima, más aún viendo como Leclerc y Sainz pulverizaban los registros en la Q2. Sin embargo, todo se vino abajo en el momento en el que la vuelta del monegasco fruto de un error en la primera curva que le hizo exceder los límites de pista. Un golpe duro para los de Maranello que tuvieron que fiar todas sus cartas a una pole de Sainz en su despedida de la escudería.
No lo consiguió el madrileño. Se quedó con la miel en los labios y finalizó en tercera posición por detrás de los McLaren. Menos de una décima le separó de colarse entre ellos, pero no lo logró. Deberá remar el domingo en busca de llevar a Ferrari a ganar el Mundial de Constructores.