La escudería Red Bull anunció este miércoles la salida del piloto mexicano Sergio 'Checo' Pérez después de cuatro temporadas en las que contribuyó significativamente al éxito del equipo. Durante su tiempo en el equipo austríaco, Pérez logró cinco victorias, 29 podios y fue pieza clave para que la marca ganara dos campeonatos de constructores.
En el comunicado oficial emitido por Red Bull, el piloto mexicano expresó estar "increíblemente agradecido" por los logros alcanzados junto al equipo. "Ha sido un honor correr junto a Max Verstappen", declaró Pérez, refiriéndose a su compañero neerlandés, quien ahora se queda sin compañero de equipo a la espera de que Red Bull confirme a su reemplazo.
A sus 34 años, el piloto nacido en Guadalajara destacó en su mensaje que durante su etapa en Red Bull lograron "batir récords y alcanzar hitos notables", además de resaltar "el privilegio de conocer a muchísima gente a lo largo del camino". Sin embargo, su salida se produce en un momento complicado para encontrar un nuevo asiento en la parrilla de la Fórmula 1.
Aunque Pérez se quedará fuera de la F1 por al menos un año, no tiene intenciones de retirarse del automovilismo. Varios medios especializados apuntan ya a que el mexicano está en negociaciones avanzadas para unirse al Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) con una de las mejores escuderías de la categoría Hypercar. Esta transición no sería extraña, ya que Pérez llevó tiempo explorando opciones desde que supo que su salida de Red Bull era inminente, una decisión que se consolidó tras las últimas pruebas en Qatar y Abu Dabi.
El destino de Pérez podría estar ligado a Ferrari, la marca del Cavallino Rampante. El mexicano estaría ultimando un acuerdo con la escudería italiana para competir en el WEC y, específicamente, participar en las prestigiosas 24 Horas de Le Mans, una competencia en la que Ferrari ha triunfado en las dos últimas ediciones. Ferrari analiza la posibilidad de integrar a Pérez en uno de sus hypercars, y se habla de un contrato inicial para disputar cuatro o cinco carreras en la temporada.
Este movimiento también podría abrir la puerta a un papel adicional para Pérez como piloto de simulador y reserva de Ferrari en la Fórmula 1. Aunque no hay confirmación oficial, el piloto de Guadalajara podría aprovechar este rol para mantenerse cerca del 'Gran Circo' y preparar un eventual regreso en 2026, cuando nuevos equipos como Cadillac F1 entren a la parrilla.
Mientras tanto, el mexicano tendrá un año menos frenético. Alternará su tiempo entre Madrid y su ciudad natal, Guadalajara, mientras disfruta de nuevas experiencias en el automovilismo de alta competición. Su contrato con Red Bull, renovado en junio, será pagado en su totalidad, lo que le reportará alrededor de 14 millones de dólares.
Por otro lado, Red Bull debe encontrar a su sustituto. Liam Lawson, el joven británico que ha impresionado en sus recientes actuaciones, es uno de los nombres que suenan con fuerza para tomar el lugar de Checo Pérez en el equipo austríaco.