Nunca pierde la sonrisa, pero en Sepang se le vio más serio de lo que es habitual porque durante los primeros test de pretemporada el cambio en la electrónica y los nuevos neumáticos le dieron más dolores de cabeza de lo esperado. “Sinceramente, estábamos perdidos. No sabíamos qué dirección tomar ni nada”, confesó Marc Márquez después de marcar el mejor crono (1:29.158) en la última jornada de entrenamientos en Phillip Island, donde se han producido hasta 13 caídas y donde el italiano Danilo Petrucci se ha fracturado tres metacarpianos de su mano derecha, por lo que tendrá que pasar por el quirófano y se perderá el último test de la pretemporada, los próximos días 2, 3 y 4 de marzo en el circuito qatarí de Losail.
Al piloto español del equipo Repsol Honda le ha cambiado la cara en el trazado australiano porque vuelve a lucir una sonrisa radiante tras encontrar la dirección de trabajo a seguir y avanzar mucho en cuanto a la electrónica durante los tres días de test, pero no quiere lanzar las campanas al vuelo y se muestra cauto. “Hemos empezado a trabajar bien y Honda ha hecho una buena labor. Tenemos una base con la electrónica y parece que cada vez vamos mejor, pero quiero tener cuidado con estas cosas porque esta pista es muy especial e intuíamos que podíamos ir bien. Creo que en Qatar sufriremos más, sobre todo en aceleración, porque hay muchas curvas donde hay que girar más y es donde sufrimos. Allí no espero que seamos los más rápidos, pero intentaremos ser competitivos”, reflexionó Márquez, que tampoco se libró de las caídas al final de la sesión y cuando la temperatura había descendido considerablemente.
“Salí en el tramo final con algunas cosas para probar. Sabíamos que la temperatura había bajado mucho. En la primera vuelta comprobé el circuito, en la segunda empecé a apretar y era muy crítico. Incliné mucho en la curva 9 y perdí el tren delantero, pero iba muy despacio. Intenté salvarlo, pero acabé en la grava”, narró después de concluir el test australiano con sensaciones positivas.
“Tengo de nuevo confianza sobre la moto. Ha sido el primer día en el que me he sentido consistente y capacitado para probar bien las cosas. A veces, cuando estás perdido y no entiendes las cosas, es complicado probar distintas configuraciones porque es difícil sentirlas, pero empiezo a sentirme bien. Parece que estamos mejorando, aunque aún sufrimos con el neumático delantero. No sé porqué, pero no puedo explotar todo el potencial de estas gomas. Uno de mis puntos fuertes con los Bridgestone era dar una vuelta a tope y con los Michelin sufro en eso", explicó antes de desvelar que debe centrarse en el chasis porque ha elegido uno diferente al de Dani Pedrosa y Cal Crutchlow.