Ganar en el trazado que se encuentra a 13 kilómetros de su casa en Tavullia era una cuestión de honor. Un circuito vestido de amarillo que al final vio como Dani Pedrosa desbarataba los planes de Valentino Rossi, que se había propuesto triunfar en su casa para marcar territorio y recortar a Marc Márquez los máximos puntos posibles en la general. El piloto español del equipo Repsol Honda renació en Misano tras una lección magistral de pilotaje y arruinó el objetivo de Il Dottore que, pese a no ganar, subió al segundo escalón del podio y le recortó siete puntos al líder de MotoGP, del que ahora le separan 43.
Rossi ejecutó a la perfección el plan trazado, que no era otro que realizar una salida perfecta y tirar a fondo desde el inicio para que Jorge Lorenzo, que partía desde la pole, no se le escapara. Sólo aguantó una vuelta completa detrás de su compañero de equipo porque, cuando el italiano vio la menor oportunidad, superó a su compañero de equipo mientras que por detrás de ellos Márquez hacía lo posible para superar a Maverick Viñales, con el que se tocó hasta en dos ocasiones.
Il Dottore, que eligió la misma combinación de neumáticos que su compañero de equipo (compuesto medio delante y blando detrás), comenzó a apretar al máximo y a poner tierra de por medio con Lorenzo, del que llegó a distanciarse algo más de un segundo en el ecuador de la prueba. Fue en ese momento cuando renació Pedrosa, que había caído hasta la sexta posición en los compases iniciales de la prueba pero que en seguida se deshizo de Maverick y de Dovizioso para situarse a rueda de Márquez tras marcar dos vueltas rápidas consecutivas y batir el récord del circuito.
Fue justo en el ecuador de la carrera y en el mismo punto donde al inicio Rossi había superado a Lorenzo (curva 14), cuando Pedrosa se deshizo de Márquez y pasó a ocupar la tercera plaza. Sólo tres giros después, dio buena cuenta de Lorenzo y se marcó como siguiente objetivo arrebatarle la primera posición de Rossi. Lo hizo cuando restaban seis vueltas para el final, con un adelantamiento limpio en la curva 3. Todavía tuvo tiempo Pedrosa de marcharse en solitario hacia su primera victoria de la temporada para, una vez más, renacer de las cenizas.