Cuando el pasado fin de semana se proclamó campeón del mundo de MotoGP en Motegi, ya avisó de que a partir de ahora tocaba divertirse y arriesgar después del ejercicio de contención realizado a lo largo del curso que le había convertido en el único piloto de las tres categorías del campeonato del mundo que había puntuado en todas las carreras. Lo que no imaginaba Marc Márquez es que se iba a cumplir con exactitud el mismo guión que en 2014, cuando también se coronó en el circuito propiedad de Honda Racing Corporation (HRC) y una carrera después, también en Phillip Island, se cayó cuando lideraba en solitario y con comodidad la carrera.
“He salido muy fuerte porque sabía que tenía que marcar distancia para poder escaparme desde el inicio. La caída ha sido un error totalmente mío porque he frenado muy tarde”, se lamentó el piloto del equipo Repsol Honda tras sufrir una caída en la décima vuelta y después de haber tomado la delantera desde el primer giro al superar a Pol Espargaró en los compases iniciales.
Crutchlow y Rossi fueron los que sacaron provecho del resbalón de Márquez, porque el piloto británico logró su segunda victoria en MotoGP tras la conseguida esta misma temporada en Brno y el italiano, después de una remontada antológica desde la decimoquinta posición de la parrilla de salida, se situó en los puestos del podio justo antes de que la caída de Márquez y tras superar a Aleix Espargaró al inicio del décimo giro.
“Esta mañana hemos descubierto que teníamos un buen ritmo en estas condiciones de seco. En las primeras vueltas me he divertido mucho adelantando a muchos pilotos. Cuando se ha caído Marc, pensaba que podía ganar porque yo esperaba poder llegar hasta Cal pero después he visto que era muy rápido”, reflexionó Il Dottore tras realizar una discreta salida que le llevó a avanzar sólo dos plazas. Fue a partir del segundo giro cuando comenzó a remontar posiciones hasta superar a Jorge Lorenzo, que finalizó sexto, dos vueltas después. La segunda posición de Rossi en Phillip Island le permite ampliar a 24 puntos su ventaja en la pelea por el subcampeonato del mundo de MotoGP con su compañero de equipo, al que acecha Maverick Viñales –a 11 puntos-.
El piloto de Suzuki, que también partía muy retrasado –desde la decimotercera posición-, remontó siguiendo la estela de Rossi y peleó con su compañero de equipo por el tercer escalón del podio hasta que Aleix Espargaró se fue al suelo cuando restaban cuatro vueltas para la conclusión de la carrera.