El duelo por el título de MotoGP llega a su fin este fin de semana en el circuito Ricardo Tormo de Cheste en una de las temporadas más peleadas de la historia reciente. Cinco candidatos se mantuvieron en la pelea por el cetro de campeón traspasado el ecuador del curso y hasta en cinco ocasiones se cambió de líder después de que Maverick Viñales, Valentino Rossi, Andrea Dovizioso y Marc Márquez se alternaran al frente de la general.
Como pronosticó el piloto español antes de iniciar la gira transoceánica, la corona se decidirá en Valencia en una carrera en la que parte con una renta de 21 puntos sobre Andrea Dovizioso, que está obligado a ganar y necesita además que su contrincante no termine entre los 11 primeros. Las estadísticas inclinan la balanza a favor de Márquez porque en las seis carreras ganadas por el italiano sólo en una ocasión se quedó fuera de los 11 primeros tras romper el motor de su Honda RC213V en Silverstone, un contratiempo que no se producía desde hace una década.
“Es la tercera vez que me juego el título en la última carrera. En comparación con 2013 tengo más puntos de ventaja [en aquella ocasión contaba con 13], pero no me puedo permitir subestimar a nadie. Esta es la carrera más importante de la temporada”, apunta el piloto español antes de llegar al circuito de Cheste, donde la mayor remontada han sido los ocho puntos (Nicky Hayden se los recuperó a Rossi en 2006) y donde en tan sólo tres ocasiones se ha producido un cambio de líder en la última carrera: Wayne Rainey (1992), el propio Hayden (2006) y Jorge Lorenzo (2015).
“Estoy disfrutando como un loco. Marc irrumpió en MotoGP en un momento complicado de mi carrera. Lo veía y pensaba que era imposible que algún día pudiera medirme con él como lo estoy haciendo ahora”, analiza Dovizioso, que en 2006 perdió el título de campeón del mundo de 250cc frente a Jorge Lorenzo en la última carrera.
El que ahora es su compañero de equipo en Ducati llegó a Valencia con 13 puntos de renta sobre él, que no pudo pasar de la séptima posición –su peor resultado del año con Honda- ante el batallón desplegado por Aprilia. Alex de Angelis, quien sumó su primera victoria en la categoría, Roberto Locatelli (segundo), Héctor Barberá (tercero), el propio Lorenzo y, sobre todo, Álex Debón, que ejerció de tapón para el italiano y de fiel escudero para su amigo, impidieron que Dovizioso se proclamara campeón en un circuito donde nunca ha ganado y donde sólo ha subido al podio en dos ocasiones: segundo en 2004 (125cc) y tercero en 2011 (MotoGP con Honda).
La trayectoria de Márquez en el circuito Ricardo Tormo es totalmente antagónica a la de Dovizioso. Desde 2012 siempre ha subido al podio, ha ganado en dos ocasiones (2012 y 2014) y ha certificado dos títulos de campeón del mundo en la
última carrera del año.
En 2010 llegó a Valencia con una renta de 17 puntos sobre Nico Terol, por lo que una octava posición le bastaba. Se conformó con acabar cuarto para no meterse en líos, justo por detrás de Terol en una carrera que ganó Bradley Smith y en la que Pol Espargaró subió al segundo escalón del podio.
En 2013 se proclamó campeón el año de su debut en MotoGP. Llegó a Valencia con 13 puntos de margen sobre Lorenzo, con lo que le bastaba con terminar en la cuarta posición si el piloto de Yamaha ganaba una carrera en la que se esforzó por ralentizar el ritmo para que entraran en juego el mayor número posible de pilotos. Márquez finalizó en una cómoda tercera posición, por detrás de Lorenzo y de su compañero Dani Pedrosa.