El Red Bull Ring de Spielberg es una pista de fuertes frenadas y donde la aceleración juega un papel primordial, algo que hace que las Ducati dominen con mano de hierro. Un trazado en el que Andrea Dovizioso y Jorge Lorenzo buscarán este domingo la victoria… con permiso de Marc Márquez. Los pilotos de la fábrica de Borgo Panigale no han podido con el líder de MotoGP, que ha conseguido su segunda pole consecutiva en el circuito austriaco por sólo dos milésimas sobre el italiano. Lorenzo, que será compañero de Márquez la próxima temporada, ha completado la primera línea de la parrilla de salida.
“Tocaba hacer lo que hace Rafa Nadal, devolverla. A ver cómo aguantamos mañana”, ha señalado Márquez, que la pasada temporada protagonizó un duelo estelar hasta la última curva con Dovizioso, que terminó ganándole la partida al español.
Márquez, que había programado con su equipo técnico hacer dos paradas en el box, abortó el plan cuando vio que las Ducati amenazaban sus intereses y Dovizioso se situaba a sólo dos milésimas de su mejor crono (1:23.241). El piloto español del equipo Repsol Honda apretó los dientes y siguió rodando mientras en el garaje esperaban sus mecánicos para cambiar los neumáticos. No consiguió mejorar su crono, pero sí protegerlo para sumar su cuarta pole de la temporada, la 49 en MotoGP y la 77 en el Campeonato del Mundo.
Una vez más, las Yamaha naufragaron en Red Bull Ring de Spielberg. Valentino Rossi no fue capaz de superar la repesca y partirá desde la decimocuarta posición de la parrilla de salida. El piloto italiano ha cosechado su peor clasificación desde el Gran Premio de Australia de 2016, donde tomó la salida desde la decimoquinta plaza aunque finalizó segundo. Mientras, Maverick Viñales partirá desde la undécima posición de la parrilla tras lograr clasificarse por los pelos para la sesión de clasificación.